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En determinados casos, y siempre que haya un interés legítimo detrás, la obtención de información solo puede ser llevada a cabo por profesionales en el sector de la investigación privada.
En ocasiones vital para la obtención de pruebas recogidas en un informe con validez judicial, el papel de un detective privado está regido por la Ley 5/2014, del 4 de abril, de Seguridad Privada, que recoge modificaciones a la anterior legislación aprobada en 1992 y especifica el ámbito de actuación y limitaciones de su actividad profesional.
Qué ofrece un detective privado
Los detectives privados son expertos en la obtención de información de manera discreta y eficiente. Con formación específica en recopilación de datos, sus actividades son muy útiles en aspectos de la vida cotidiana y pueden jugar un papel vital en multitud de casos, que fundamenten la adecuada toma de decisiones para la parte interesada.
Entre los servicios que puede ofrecer un detective privado, se encuentran:
- Las investigaciones en el ámbito conyugal. Los detectives privados son contratados frecuentemente para investigar situaciones relacionadas con infidelidades o problemas conyugales, aunque también abordan casos relacionados con la tutela de hijos al cargo y otras cuestiones maritales.
- Las investigaciones empresariales. En el ámbito empresarial, los detectives privados son cruciales para abordar casos de fraude, robo de propiedad intelectual, competencia desleal y otros asuntos que pueden afectar de manera directa a una empresa. Proporcionan inteligencia valiosa para respaldar estrategias comerciales y tomar decisiones fundamentadas.
- La localización de personas desaparecidas. La habilidad para localizar a personas desaparecidas o perdidas es otra especialidad de los detectives privados y pueden suponer un punto de vista complementario a la investigación oficial. Además, también son expertos en la localización de herederos o fugitivos fiscales.
- La investigación legal de un determinado asunto. Colaborar con abogados y bufetes legales es una función común de los detectives privados. Su capacidad para recopilar pruebas, entrevistar testigos y realizar investigaciones exhaustivas puede resultar crucial en casos judiciales y procedimientos legales.
- Actividades de contravigilancia y seguridad. En el ámbito de la seguridad, los detectives privados ofrecen servicios de contravigilancia, evaluación de riesgos y seguridad personal. Su experiencia contribuye a la protección de individuos y empresas contra amenazas y situaciones potencialmente peligrosas.
Cuánto cuesta contratar un detective privado
El coste de contratar un detective privado depende de varios factores: la ubicación de la investigación, la naturaleza de la misma, el tiempo durante el cual se prolonga… todo ello queda desglosado al cliente de manera clara, quedando justificados todos los gastos.
Las cantidades exactas dependen también de la agencia contratada, aunque está claro que apostar por una agencia con experiencia contrastada y años dedicándose a la investigación privada de manera exitosa requiere una inversión mayor que la de apostar por otras soluciones con menos garantías.
Tomando como referencia los precios de Doverty, una de las mejores agencias de detectives privados de Madrid, el precio por hora depende del tipo de seguimiento y de los recursos utilizados, como explican en su propia web.
- Seguimientos sencillos. 50 euros la hora. Un detective implicado y un vehículo, coche o moto. Incluidos en el precio hasta 30 kilómetros por servicio.
- Seguimientos estándar. 75 euros la hora. Dos detectives implicados y un vehículo, coche o moto. Incluidos en el precio hasta 40 kilómetros por servicio.
- Seguimientos complejos. 90 euros la hora. Dos detectives implicados y dos vehículos, dos coches o dos motos. Incluidos en el precio hasta 50 kilómetros por servicio.
Todos los servicios que ofrece Doverty incluyen un servicio mínimo de 4 horas, gastos de informe y grabaciones de vídeo, y se llevan a cabo en horario de lunes a viernes, de 9 de la mañana a 9 de la noche.
Cómo contratar a un detective privado
El primer paso para contratar a un detective privado es encontrar una buena agencia de detectives. Doverty es la mejor opción por experiencia, profesionalidad y precios, y su trayectoria habla por sí sola. Pero para facilitar el trabajo del investigador, primero es necesario:
- Definir un objetivo claro. Antes de contactar a un detective privado, es crucial tener una comprensión clara de los objetivos de la investigación y el alcance esperado. Establecer metas específicas y proporcionar detalles precisos facilitará la planificación y ejecución de la investigación.
- Saber cuál va a ser el proceder del detective. Esto queda claro desde el primer momento, y además, Doverty facilita puntualmente informes a sus clientes para que conozcan los detalles del avance de la investigación, que pueden ser consultados incluso de manera remota.
- Demostrar la legitimidad de la investigación. Aunque el detective lo comprobará de todas formas, es imprescindible que se pueda justificar por qué se desea iniciar una investigación y a quién. Si no hay legitimidad detrás que fundamente el inicio de las pesquisas, el detective no podrá dar comienzo a las mismas.
- Facilitar vías de comunicación. Además de la plataforma digital a través de la cual el investigador privado podrá adjuntar la documentación necesaria que el cliente necesite, es responsabilidad de éste facilitar métodos de contacto válidos y en funcionamiento para que el investigador, si lo necesita, pueda ponerse en contacto.
Respetar el ámbito de actuación del detective. Es crucial que para que el investigador pueda trabajar el cliente deje correr por su cuenta el curso de la investigación, puesto que hay límites legales que no pueden sobrepasarse para respetar la intimidad y el derecho al honor del investigado, algo que debe respetar también el cliente.
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