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Aunque parezca algo surrealista, el deporte está muy relacionado con la diarrea, de ahí el término diarrea del corredor. Esta condición suele afectar a los corredores durante y después de comer, llegando a convertirse en algo muy incómodo. En GNDiario te contamos todo sobre ello y sobre cómo evitarla.
¿Qué es la diarrea del corredor?
La diarrea del corredor es más común de lo que pensamos, incluso en muchas ocasiones hemos podido experimentarla en nuestro propio organismo. Se trata de una condición que afecta sobre todo a los corredores durante y después de correr. Lo que sucede es que se experimentan movimientos intestinales frecuentes, a veces incluso generando la necesidad inmediata de detenerse para ir al baño. La diarrea es uno de los síntomas, pero también pueden experimentarse otros como náuseas, calambres o gases.
Según los expertos de Mayo Clinic, aquellos que corren alrededor de 5 kilómetros o más en un solo momento son los más propensos a experimentar este fenómeno.
En cuanto a los síntomas, suelen experimentarse mientras estamos corriendo y podrían detenerse hasta unas cuantas horas después de terminar.
Si tú también lo has sufrido y te preguntas por qué sucede, hasta el momento no se ha determinado una causa particular relacionada con la diarrea de corredor. Aun así, los expertos suelen relacionarlo con un desequilibrio de electrolitos y líquido entérico, la estimulación autonómica del sistema nervioso, isquemia, y trauma mecánico. Sin embargo, se debe revisar el programa de entrenamiento de la persona que lo sufre, al igual que el tipo de dieta.
¿Cómo podemos evitarla?
A pesar de tratarse de una “diarrea común”, existen algunos elementos externos a nuestro sistema digestivo que también pueden contribuir a la aparición de la diarrea del corredor, como por ejemplo el estrés y la ansiedad previos a una carrera.
Cuando sufrimos este tipo de trastorno intestinal, podemos recurrir a una serie de aspectos que podemos modificar para evitar la aparición de la diarrea del corredor:
- Evitar el consumo de alimentos con mucha fibra o que puedan generar gases, por lo menos un día antes de la carrera. Algunos ejemplos serían alimentos como la fruta o las ensaladas, que se recomiendan consumir después del entrenamiento o carrera.
- Limitar o evitar edulcorantes como isomaltosa o sorbitol que se encuentran en caramelos o chicles.
- Durante una franja horaria de tres a seis horas antes de correr se debe evitar el consumo de cafeína y alimentos con mucha grasa.
- No comer nada en las dos horas previas a la práctica deportiva o a la competición.
- Beber mucho líquido antes, durante y después de la práctica deportiva para evitar sufrir deshidratación y que esta nos produzca una diarrea. También se recomienda evitar los líquidos tibios.
- Cuando hacemos una práctica deportiva intensa y de larga duración, solemos recurrir a barras y geles energéticos que nos ayuden a reponer energía. Pues bien, esta serie de productos puede provocar diarrea del corredor en muchas personas, por lo que es importante evitarlos.
- Si se sufre algún tipo de intolerancia a la lactosa, aunque no sea muy alta, es recomendable evitar leche y otros productos lácteos.
Hacer deporte con diarrea
Es importante saber escuchar a nuestro cuerpo, ya que siempre nos quiere decir algo sobre nuestro estado actual. En el caso de sufrir problemas estomacales o similares a la diarrea del corredor, puedes optar por otros deportes sin necesidad de parar definitivamente su práctica, por ejemplo, el yoga, te ayudará a reducir la aparición de la diarrea. En cuanto a tus entrenamientos, cámbialos por pequeñas prácticas diarias como subir y bajar escaleras en lugar de ascensor, caminar en vez de usar el coche, etc.
Y recuerda, cuidar tu alimentación y apoyarte de un probiótico puede ser una gran solución para luchar contra los trastornos estomacales sin necesidad de impedir tus entrenamientos o competiciones deportivas.
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