El desafío actual de España ante las energías verdes

España continúa dependiendo de las energías exteriores, que se mantienen en el 89 % según datos del último estudio del Observatorio de Energía y Sostenibilidad. Este informe señala que el modelo de energía en nuestro país presenta importantes desafíos: las emisiones de dióxido de carbono, el impacto medioambiental y el reto de la eficiencia. 

El reto de las energías verdes en España

El Gobierno de nuestro país presentó en mayo de 2020, el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética ante la emergencia climática. La finalidad de esta estrategia es la reducción de un 20 % de emisiones de gases de efecto invernadero para 2030. De cumplirse esta estrategia nos iríamos a niveles de 1990. En 2050 se pretende alcanzar la neutralidad de emisiones, siendo las energías verdes las que cubrirán el 97 % del consumo.

En este momento, la Unión Europea (UE) apuesta por modelos de política medioambiental en la zona Euro y los países miembros apuestan ya por las energías verdes.

Las energías verdes solo representan el 10,8 % de la aportación al consumo mundial según el último informe de BP del Observatorio de Energía y Sostenibilidad. En el otro extremo, nos encontramos que el petróleo ocupa el 34 % del consumo global, el carbón un 27 % y el gas natural un 24 % energías que copan prácticamente el mercado.

Las ciudades, en búsqueda de sostenibilidad trabajan para lograr un modelo de consumo que sea asequible, seguro y responsable. Un compromiso en el que ya trabaja IMEnergy: una empresa de diseño, ingeniería, suministro y construcción de plantas energéticas. Y es que tal y como indica esta compañía, la energía es un pilar fundamental para el desarrollo sostenible de las urbes.

España invertirá en energías verdes

El Observatorio de la Sostenibilidad propone invertir 42.818 millones de euros privados y públicos en inversiones verdes en ámbitos como la energía, el transporte sostenible o la rehabilitación energética, lo que generará 1,13 millones de empleos.

El ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha sacado a subasta el 15 % del paquete de renovables previsto hasta 2025. La puja fue para 1.000 MW de tecnología fotovoltaica y otros 1.000 de eólica terrestre. El resto quedó sin restricción tecnológica. En España, empresas como: Iberdrola, Naturgy, junto a X-Elio, Capital Energy, EDP Renováveis y Acciona, fueron las empresas adjudicatarias.

El Observatorio destaca que nuestro país es uno de los países con mayor capacidad para llevar a cabo esta transición hacia las energías renovables. En el caso de IMEnergy, la empresa sobresale por la energía solar fotovoltaica y termosolar como principales fuentes de producción de energía en España. Nuestro país recibe una media de 2500 horas/año de sol.

Según indica José Manuel Suárez, CEO de IMEnergy, “las previsiones son muy favorables, las energías verdes son la clave de la recuperación económica y un paso imprescindible para lograr un futuro sostenible”.

El Gobierno de España piensa en almacenar energías renovables

Según avanzó el Consejo de Ministros, la meta es alcanzar los 20 gigavatios (GW) en 2030 y los 30 GW en el horizonte de 2050. Con este plan se garantiza la seguridad de suministro y los precios de la energía serán más bajos.

La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero afirmó que “se empiezan a poner esos cimientos para que haya una fórmula de almacenamiento de las energías verdes que puedan entrar y hacer frente a las brechas que puedan surgir en un momento determinado y que se almacene cuando haya excedente para tenerla reservada en los momentos que más se necesita o cuando haya déficits de generación por la situación del viento o por las situaciones climatológicas”.

Por su parte, la vicepresidenta cuarta, Teresa Ribera, considera que “esta estrategia coloca a España al frente de lo que se está haciendo en Europa. Nuestro países una isla energética, lo que nos obliga a tener que adelantarnos para cumplir nuestro compromiso con la neutralidad climática”.