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Nueva Brunswick, en Canadá, es el lugar donde las mareas más altas del mundo suben y bajan más de 12 metros, revelándonos el escondite de fósiles más rico de Norteamérica.
Cabe destacar que la mayoría de los descubrimientos han sido a manos de investigadores y científicos ciudadanos en esta provincia poco visitada.
El caso, es que la madre naturaleza hace el trabajo de excavación, y cada día sale algo nuevo. Además, lo más alucinante, es que los viajeros pueden ver estos restos que hablan de la historia y ayudar a encontrar otros nuevos.
Fósiles de dinosaurios y antiguos ciempiés que la marea desentierra para el humano de hoy
Con el paso de las tres eras evolutivas de la Tierra, Nueva Brunswick ha sido todo esto:
- Una incubadora volcánica de vida invertebrada
- Una selva tropical rica en oxígeno y biodiversidad que dio su origen a los dinosaurios.
- Tundra dominada por gigantes peludos y errantes como los mastodontes.
La riqueza de la abundacia paleontológica del lugar se conoce por la comunidad científica desde 1840, cuando las minas de carbón revelaron flora y fauna en forma de fósiles.
Los expertos fueron descubriendo huellas de invertebrados y vertebrados que quedaron selladas en la piedra a lo largo de las playas de esta costa atlántica.
Por su parte, Olivia King, investigadora asociada del Museo de Nueva Brunswick, ha realizado varios hallazgos notables en los últimos tres años. Entre ellos, la mandíbula de un proto-reptil del tamaño de una salamandra y las huellas del dinosaurio más antiguo del continente, posiblemente el más pequeño (unos cinco centímetros).
La experta afirma que la gente solía pensar que los fósiles importantes solo se encontraban en Nueva Escocia, pero lo que se ha encontrado en este lugar es igual o incluso más antiguo que los yacimientos escoceses.
Si te acercas por allí tu mismo puedes buscar parte de la historia del planeta
Los 2.250 km de costa de la provincia ofrece a los turistas sumergirse en la búsqueda de fósiles. Allí, los guías turísticos realizan excursiones a pie y a remo.
Así mismo, podremos explorar la playa cuando baja la marea, pues el agua retrocede hasta 200 metros, y se puede caminar por las marismas del fondo oceánico.
Claro, que si prefieres buscar fósiles por ti mismo, ten en cuenta la carta de mareas, por seguridad, pues hay unas seis horas entre punto más bajo y el más alto del agua. Cuando la marea comience a subir, lo hace medio metro cada 6 minutos, y en menos de una hora podemos ver una playa desbordada.
Pero, ¿Cómo podemos buscar fósiles?
Muy sencillo:
- Algunas huellas, que son como zig-zags de huellas de dedos y cola, están incrustadas en acantilados.
- Otras aparecen en rocas que la marea esparce por la arena
Lo que si debemos tener claro es que los descubrimientos se dejan en el lugar, y debemos notificarlo al Museo de Nueva Brunswick, para que puedan evaluar los fósiles los investigadores especializados, y si se da un hallazgo significativo, tu nombre puede aparecer en el museo.
En la zona hay multitud de lugares, declarados por la UNESCO, que nos dejan ver restos de fósiles de hace 80.000 años. Si vas a visitar esa zona de Canadá, y eres un adicto de la prehistoria y la paleontología, no pierdas la oportunidad de perderte por estos parajes que dejaron bien conservadas las huellas de tetrápodos y protodinosaurios.
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