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Ir al gimnasio es una vía de escape para muchos en su día a día. Sin embargo, todos debemos saber que, al tratarse de un espacio cerrado con muchas personas, es importante cumplir con una serie de medidas de higiene.
Por eso, para evitar contraer virus o enfermedades, es importante mantener una higiene en el gimnasio. A continuación, te decimos cómo hacerlo.
Una mala higiene durante tu entrenamiento puede ser peligroso
Acudir a un gimnasio es sinónimo de contagio, ya que se trata de un lugar cerrado y lleno de gente. El simple hecho de estornudar o no lavarse las manos ya puede ser perjudicial para las máquinas e instrumentos del propio recinto.
Asimismo, existen hongos y bacterias que permanecen en las superficies de las máquinas donde ejercitas, lo que puede provocar una alteración grave en la piel. A su vez, las toallas o las salas de las piscinas y baños pueden acumular hongos.
Una mala higiene en el gimnasio puede dar lugar a la conocida como tiña inguinal o la infección por estafilococos. Así lo señalan varios expertos.
Consejos para mantener la higiene en el gimnasio
Ante la posibilidad de contagio por infecciones y hongos, existen algunos consejos que nos ayudan a mantener la higiene en el gimnasio y disfrutar sin ningún peligro de nuestros ejercicios favoritos durante el entrenamiento.
Los expertos de Mejor con Salud nos enumeran los siguientes consejos:
- Lleva tus propios utensilios. Muchos ejercicios requieren de utensilios concretos, por ejemplo, una esterilla para reposar las manos, toallas o incluso fajas. Por eso, procura llevarlo tus utensilios, así evitarás contagios.
- No compartas el bebedero. Muchos deportistas recurren al grifo del agua para beber agua e hidratarse. Sin embargo, esto puede acabar en infección, ya que el sudor puede quedarse en la misma máquina. Por eso, lleva tu propia botella de agua.
- Desinfectar los equipos. Antes de comenzar tus rutinas puedes usar toallas desinfectantes o un gel hidroalcohólico para limpiar las máquinas.
- Lávate las manos. Los expertos recomiendan lavar las manos antes y después de los entrenamientos con jabón.
- No exponer heridas. Las infecciones cutáneas o heridas abiertas no deben exponerse en el gimnasio. Para ello, cúbrelas con vendas impermeables y evita sesiones de piscina o bañeras de hidromasajes, ya que las bacterias pueden estar en el agua.
- Usa calzado o protector en las áreas comunes. El riesgo de tiña en la piel por caminar descalzo en las zonas públicas es peligroso, por lo que mantener la higiene en el gimnasio en este aspecto es de vital importancia.
- Lava la ropa apenas te la quites. Aunque la higiene en el gimnasio es importante, procura no repetir la ropa sudada en un nuevo entrenamiento. Asimismo, los expertos recomiendan usar ropa holgada para absorber la humedad.
- No prestes toallas o artículos de higiene y mantenlos en tu mochila.
- Báñate al finalizar la rutina.
- En el caso de no sentirse al 100 % de salud, no acudas al gimnasio.
Ahora que ya sabes cómo mantener una buena higiene en el gimnasio, es hora de preparase y salir pitando hacia él. ¿A qué esperas? ¡Comienza el día con energía!
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