España es el país de la UE en el que la proporción de personas que compatibilizan pensión y trabajo lo hacen porque lo “disfrutan”, pues únicamente el 17,9 % esgrime esa razón, frente a otras causas como la necesidad económica.
A partir de 2025, las pensiones en España se actualizan con cambios importantes. La edad de jubilación será de 65 años solo para quienes hayan cotizado al menos 38 años y 3 meses.
En España, las personas con derecho a una pensión por incapacidad permanente pueden seguir aplicando el mínimo por discapacidad en su declaración del IRPF al llegar a la jubilación.