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Activistas y representantes del movimiento de la discapacidad han alzado la voz para exigir justicia para las personas que padecieron esterilizaciones forzosas. En un acto conmemorativo por el Día Internacional de la Mujer, la Fundación Cermi Mujeres hizo público un manifiesto que insta a los poderes públicos a implementar medidas concretas de reparación e indemnización para las víctimas de esta grave vulneración de derechos humanos.
Un llamado a la justicia y la reparación de las esterilizaciones forzosas
Bajo el lema 'Yo sí te creo', el documento aboga por la aprobación de una "Ley de reconocimiento, reparación e indemnización a las víctimas de esterilizaciones forzosas o no consentidas". Esta iniciativa está dirigida especialmente a aquellas personas con discapacidad que fueron incapacitadas legalmente y sometidas a este procedimiento sin su consentimiento entre 1989 y 2020, bajo el amparo de una sentencia judicial.
La iniciativa busca no solo una compensación económica, sino también el reconocimiento del daño causado y la implementación de mecanismos de reparación integral. Las esterilizaciones forzosas, según denuncia el manifiesto, son una forma de violencia de género y una práctica discriminatoria que ha dejado secuelas físicas y psicológicas en muchas mujeres y niñas con discapacidad.
Discriminación y violencias específicas
El documento también destaca la discriminación estructural que enfrentan las mujeres y niñas con discapacidad, quienes se ven expuestas a violencias específicas en todos los ámbitos de la vida. Entre estas violencias se mencionan no solo las esterilizaciones forzosas sino también los embarazos coercitivos y la institucionalización involuntaria.
En este sentido, el manifiesto exige la erradicación de las esterilizaciones forzosas, unas prácticas nocivas y la aplicación de medidas eficaces en materia de igualdad de género y derechos humanos. Además, se subraya la importancia de garantizar la plena accesibilidad de los recursos de atención a la violencia de género para mujeres con discapacidad, quienes muchas veces encuentran barreras en su acceso a la justicia y a los servicios de protección.
Una macroencuesta para visibilizar la violencia
Uno de los puntos clave de la propuesta es la realización de una macroencuesta estatal que permita visibilizar la violencia que sufren las mujeres y niñas con discapacidad. Este estudio serviría como una herramienta fundamental para diseñar políticas públicas eficaces que respondan a sus necesidades y garanticen su protección.
Durante el evento, también se presentó la obra 'No Estás Sola: 25 Testimonios de Vida de Mujeres y Niñas con Discapacidad', una recopilación de historias en primera persona que reflejan las barreras, violencias y desafíos que enfrentan estas mujeres en su vida cotidiana.
La vicepresidenta ejecutiva de la Fundación Cermi Mujeres, Ana Peláez Narváez, destacó la importancia de este libro como "un testimonio colectivo que refuerza la necesidad de seguir avanzando en la defensa de los derechos de las mujeres y niñas con discapacidad". En el acto, varias de las protagonistas compartieron sus experiencias, ofreciendo un testimonio directo sobre la realidad que enfrentan y la lucha por sus derechos.
Un compromiso con la igualdad
El llamado a la acción realizado en el manifiesto busca que las autoridades tomen medidas inmediatas para garantizar que ninguna mujer o niña con discapacidad vuelva a ser víctima de esterilizaciones forzosas. Se trata de una demanda histórica de justicia y reparación que, según las activistas, no puede seguir siendo postergada.
A través de estas iniciativas, la Fundación Cermi Mujeres reafirma su compromiso con la igualdad y la erradicación de la violencia de género, asegurando que la voz de las mujeres con discapacidad sea escuchada y que sus derechos sean plenamente garantizados.
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