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La Asociación Española de Pediatría (AEP) destaca que apoyar la lactación en el trabajo reduce el absentismo y mejora el rendimiento de las mujeres lactantes. La Semana Mundial de la Lactancia Materna busca concienciar sobre la falta de medidas de protección para mujeres trabajadoras y promueve una cultura de apoyo en el entorno laboral con el lema "Amamantar y trabajar: ¡hagamos que sea posible!".
La Asociación Española de Pediatría insiste en la improtancia de la lactancia materna en el ámbito laboral
La Asociación Española de Pediatría (AEP) ha resaltado la importancia de promover la lactancia materna en el ámbito laboral, ya que esto no solo beneficia a las mujeres trabajadoras, sino que también tiene un impacto positivo en la productividad y el rendimiento laboral.
Con motivo de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se celebra del 1 al 7 de agosto, la AEP ha destacado que más de 500 millones de mujeres trabajadoras en todo el mundo no cuentan con medidas de protección de la maternidad esenciales.
Sorprendentemente, solo el 20 % de los países exigen a las empresas ofrecer pausas remuneradas e instalaciones adecuadas para la extracción de leche a las empleadas. Además, menos de la mitad de los bebés menores de seis meses son alimentados exclusivamente con leche materna, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Unicef.
En vista de esta situación, la campaña de este año se centra en el trabajo, bajo el lema "Amamantar y trabajar: ¡hagamos que sea posible!". La idea es promover un ambiente laboral más favorable para las mujeres que desean prolongar la lactancia materna más allá del periodo de baja maternal, que en España es de 16 semanas, en contraste con las recomendaciones de la OMS y Unicef.
Por lo tanto, es crucial que todos los agentes sociales que rodean a la madre y al niño, incluyendo la pareja, la familia, el personal sanitario y el entorno laboral, brinden el apoyo y las facilidades necesarias para mantener y prolongarla todo el tiempo que sea posible.
El área materna del Cnylm-AEP recomienda a las empresas: pausas para amamantar, espacios adecuados, flexibilidad horaria e informar sobre el apoyo a este acto tan natural. Estas medidas benefician a madres y empresas al mejorar el compromiso, reducir el absentismo y aumentar el rendimiento laboral.
¿Qué beneficios aporta de cara a la madre, el bebé y el propio empleo?
La lactancia materna no solo es beneficiosa para la salud de la madre y el bebé, sino que también representa un ahorro significativo para las familias y un impacto positivo en el medio ambiente.
Tanto la OMS como Unicef enfatizan la importancia de comenzarla de forma temprana, idealmente en la primera hora después del nacimiento. Además, se recomienda mantenerla exclusiva durante los primeros seis meses y continuarla hasta los dos años o más, con la incorporación de alimentos complementarios a partir de los seis meses.
Esta práctica no solo aporta nutrientes esenciales para el bebé, sino que también significa un ahorro en costos relacionados con la alimentación, como fórmulas y biberones. Además, al optar por la lactancia materna, se reduce la generación de residuos plásticos asociados con los productos de alimentación artificial, lo que tiene un impacto beneficioso en el medio ambiente.
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