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Nuestro organismo nos manda señales sobre su funcionamiento. Es tan sorprendente que se encarga de avisarnos en caso de que no estemos recibiendo el aporte necesario de nutrientes o los excesos.
Tener un cabello con tendencia a la caída, quebradizo, sin volumen y son brillo. Unas uñas blandas o que se abren en capas con estrías longitudinales. Las grietas en las comisuras de los labios o tener la piel seca, escamosa o demasiado sensible, son algunas de las señales a las que debemos prestar atención.
Esto puede darse porque nuestro cuerpo no está recibiendo el aporte de nutrientes necesarios, así lo ha explicado la Doctora Rodríguez, miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología y experta de la Unidad de Tricología y Trasplante Capilar del Grupo Jaén.
No debemos ignorar las señales que nuestro organismo nos envía
Para garantizar el aporte necesario de nutrientes al organismo es importante seguir una dieta equilibrada. Esta debe ser rica en frutas y verduras, ya que eso contribuirá a mantener un cuero cabelludo sano, un crecimiento correcto del pelo y un aspecto saludable tanto en la piel como en las uñas.
Así, la experta aconseja consumir de dos a cuatro porciones de frutas y de tres a cinco porciones de verduras al día, además de añadir el consumo de legumbres, frutos secos y semillas. También hay que consumir alimentos ricos en vitamina B, Omega 3, Vitamina K, zinc, hierro, biotina.
- Alimentos con una fuente de biotina, como los huevos, la levadura de cerveza, la soja, los cereales integrales, el aguacate, las nueces, los pistachos y la coliflor.
- Ricos en las vitaminas del grupo B. La B6 se encuentra en la avena, las anchoas, las sardinas y los cereales integrales; la B3, en los cacahuetes, el hígado, la zanahoria, el atún y el pollo; y la B5, en las pipas de girasol, el hígado y las lentejas.
- Alimento que contengan omega 3 como el pescado azul, especialmente el salmón.
- Para evitar la tendencia a la aparición de hematomas, se recomienda incluir alimentos ricos en vitamina K, como vegetales de hojas verdes, frutas como el kiwi y soja.
- Existe la necesidad de consumir alimentos ricos en zinc , como los mejillones, el cangrejo, las almejas y las ostras;
- Además de consumir los ricos en hierro , presente en las carnes rojas, los mariscos de concha, los frutos secos, las semillas, las especias, las vísceras, las lentejas, la soja en grano y también en los cereales integrales.
Debemos reducir y evitar en la medida de lo posible el consumo de azúcares y grasas saturadas
Es muy importante seguir los consejos nutricionales y darle al organismo los aportes necesarios. Pero por otro lado, debemos de dejar de consumir ese tipo de alimentos que contribuye con el exceso de grasas saturadas y proteínas que pueden influir en nuestro estado general.
"El hígado tiene que trabajar más y la eliminación de toxinas es más lenta, lo que hará que esto se refleje en el exterior en forma de piel apagada, falta de luminosidad o incluso brotes de acné", afirma Rocío Escalante, experta en dermocosmética y nutrición y titular de Arbosana Farmacia,
Escalante insiste en que no solo se debe dar prioridad a las verduras, frutas, legumbres, cereales integrales, carnes blancas y huevos en la dieta.
Sino que también se deben reducir la grasa industrial y los alimentos procesados. Beber líquidos, sobre todo agua, para mejorar el aspecto de la piel, el cabello y las uñas.
La misma opinión comparte la experta de la AEDV, quien asegura que el abuso de azúcares simples, grasas saturadas y alimentos con harinas blancas también nos mandan señales a través del empeoramiento del cabello, las uñas y la piel, especialmente en el caso de las personas que tengan pieles atópicas.
No cuidarse, el estrés y la ansiedad afectan gravemente a nuestra salud
Hay otras razones por las que el pelo puede lucir un aspecto poco saludable, y es que la mala alimentación no es la única que se encarga de mandar señales sobre nuestro estado de salud general.
El mal estado de algunas partes de nuestro organismo también puede ser un síntoma de seguir una mala rutina de cuidados, un mal champú, el abuso de planchas del pelo o secadores.
Aunque puede deberse al estrés, al uso de peinados muy tirantes, la toma de ciertos fármacos, los problemas de la tiroides o incluso al postparto.
En el caso de las uñas la experta confirma que también pueden parecer quebradizas si se hace un mal uso de las manicuras, y es que abusar de los esmaltes semipermanentes, utilizar a menudo uñas de gel o no acudir a un centro especializado a eliminar el esmalte semipermanente son culpables también de las señales que nos manda nuestro cuerpo.
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