CERMI exige una Convención de la ONU para proteger los derechos de las personas mayores ante vulneraciones

El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) ha solicitado al Gobierno de España que lidere, dentro de la Unión Europea, la petición de una Convención Internacional de la ONU sobre los Derechos de las Personas Mayores. Según CERMI, este colectivo está expuesto a vulneraciones sistemáticas de sus derechos humanos debido a su avanzada edad, lo que afecta a su inclusión y bienestar. Por ello, consideran que un tratado internacional es necesario para proteger sus derechos, al igual que lo hizo la Convención de la ONU de 2006 con las personas con discapacidad.

Necesidad de una Convención específica para personas mayores

CERMI argumenta que las personas mayores constituyen un grupo social con características que justifican la creación de un tratado internacional. La experiencia obtenida con la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad ha demostrado que este tipo de instrumentos internacionales pueden generar avances significativos en la protección de los derechos humanos. La entidad cree que, con el impulso de la Unión Europea, la ONU debería avanzar rápidamente para establecer una convención que aborde las necesidades específicas de este sector de la población.

La vulneración de los derechos de las personas mayores es un problema global que afecta a millones de individuos en todo el mundo, especialmente a medida que la población envejece.

Formas de vulneración de derechos de las personas mayores

1. Discriminación por edad (ageismo): Las personas mayores a menudo enfrentan prejuicios basados en su edad. Esto puede manifestarse en diversas formas, como trato desigual en el empleo, en los sistemas de salud o en la sociedad en general. Se les considera menos capaces o productivos simplemente por su edad, lo que les priva de oportunidades y de una participación activa en la sociedad.

2. Acceso desigual a servicios de salud: A menudo, las personas mayores enfrentan barreras para acceder a servicios médicos adecuados. En algunos sistemas de salud, las personas mayores reciben tratamientos inferiores o tardíos en comparación con otros grupos de edad, lo que impacta directamente en su calidad de vida y esperanza de vida.

3. Violencia y abuso: Las personas mayores, en particular aquellas con dependencia física o cognitiva, son más vulnerables a abusos físicos, emocionales, sexuales o financieros, especialmente en entornos de cuidado, como residencias de ancianos o incluso en sus propios hogares. La violencia contra las personas mayores es una forma oculta de violación de derechos que muchas veces no se denuncia.

4. Negligencia y abandono: Muchas personas mayores dependen del apoyo de familiares, cuidadores o instituciones. Sin embargo, la negligencia, que incluye la falta de atención médica adecuada, alimentación o incluso afecto, es otra forma de maltrato que a menudo no se visibiliza ni se sanciona.

5. Falta de autonomía y participación en decisiones: Las personas mayores son a menudo excluidas de la toma de decisiones sobre su propio cuidado, finanzas o vida en general. Esta pérdida de autonomía puede ser vista en situaciones donde se les quitan sus derechos legales sin su consentimiento, por ejemplo, en decisiones de tutela, lo que los despoja de su capacidad para gestionar su vida.

6. Acceso limitado a la justicia: Las barreras legales y burocráticas a menudo hacen difícil para que los mayores defender sus derechos. Además, pueden tener dificultades para comprender procesos legales complejos o para acceder a abogados que comprendan las problemáticas específicas que afectan a los ancianos.

7. Condiciones de vida inadecuadas: Muchos ancianos viven en condiciones de pobreza o aislamiento social, lo que afecta directamente su bienestar. En muchas sociedades, el apoyo económico y social para las personas mayores es insuficiente, lo que conduce a situaciones de vulnerabilidad extrema.

Causas subyacentes de la vulneración de derechos

- Falta de legislación adecuada: En muchos países, no existen leyes específicas que protejan los derechos de las personas mayores. Incluso donde las leyes existen, a menudo son insuficientes o no se aplican adecuadamente.

- Cambio demográfico: Con el envejecimiento acelerado de la población en muchos países, los sistemas sociales, económicos y de salud no han sido capaces de adaptarse lo suficientemente rápido para abordar las necesidades específicas de las personas mayores.

- Falta de conciencia y sensibilización: Muchas personas no son conscientes de los derechos de los mayores o no comprenden las dificultades que enfrentan, lo que perpetúa la discriminación y el maltrato.

Impacto de la vulneración de derechos

La vulneración de los derechos de las personas mayores no solo afecta su bienestar físico y emocional, sino que también tiene consecuencias sociales y económicas. La exclusión de este grupo no solo limita su participación en la sociedad, sino que puede aumentar la carga sobre los sistemas de salud y asistencia social debido a la mayor necesidad de atención médica y apoyo.

Para contrarrestar la vulneración de derechos, se han propuesto diversas medidas a nivel internacional y nacional:

1. Legislación específica: Se necesita un marco legal internacional sólido, como una Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas Mayores, que proteja sus derechos y garantice su acceso a una vida digna y plena.

2. Políticas públicas integrales: Es crucial desarrollar políticas que aseguren el acceso de las personas mayores a servicios de salud, vivienda, transporte y empleo, adaptadas a sus necesidades.

3. Promoción de la educación y concienciación: Aumentar la conciencia sobre los derechos de los mayores, el ageismo y los abusos es fundamental para cambiar actitudes sociales y reducir las violaciones de sus derechos.

4. Protección jurídica y acceso a la justicia: Deben implementarse mecanismos que faciliten a las personas mayores denunciar abusos o maltratos, y que garanticen un trato justo en los procesos judiciales.