El Tribunal Supremo se opone al indulto de los condenados del procés

El Tribunal que sentenció a los líderes independentistas, liderado por Manuel Marchena, como presidente de la Sala de lo Penal del Supremo, ha rechazado la medida de gracia dado que los condenados no han puesto de su parte para justificar las “razones de justicia, equidad o utilidad pública” ni han mostrado alguna muestra de arrepentimiento.

El Supremo ha rechazado la medida de gracia

Pedro Sánchez tiene la pelota en su campo, los indultos a los presos del procés ya se encuentran en su despacho con el informe del Tribunal Supremo en el que se posicionan fuertemente en contra de su concesión. El informe del Tribunal Supremo es preceptivo, pero no vinculante, e imposibilita un indulto total dada su negativa.

24 horas, es lo que ha tardado el Supremo en contestar al presidente Pedro Sánchez, después de que éste preparara las vías del indulto en búsqueda de una mejora de la “convivencia” y el “reencuentro”.

El Tribunal Supremo se opone argumentando que los personajes con cargos de sedición realizaron un “ataque a la paz pública y a las resoluciones judiciales como fundamento de convivencia”, señalando que no se muestran arrepentidos y que incluso declaran que “lo volverían a hacer”, provocando que el Supremo considere que los presos quieren reincidir, lo que deriva en que el indulto sea una solución inaceptable.

Tienen que cumplir las penas

El Tribunal Supremo no se queda solo en la oposición a los indultos, sino que defiende el cumplimiento de cada pena de prisión impuesta a los líderes soberanistas. El Supremo contesta que "una sociedad pluralista, inspirada en valores democráticos, puede exigir mediante la imposición de una pena que la ruptura de las bases de la convivencia nunca sea el fruto de una decisión unilateral, apoyada en la engañosa movilización de una ciudadanía a la que irresponsablemente se empuja a construir un nuevo Estado que solo existe en la imaginación de sus promotores".

El informe del Tribunal tiene para todos, argumenta contra los presos, contesta a los particulares que apoyan el indulto como UGT o Frances Jufresa e incluso contra las cárceles catalanas. También tiene una réplica a las críticas de los dos magistrados del Tribunal Constitucional que llamaron “desproporcionadas” las sentencias a los acusados.

Fue un ataque a la convivencia democrática y se cruzaron los límites

Para el Supremo es absurdo que se argumente que las penas por sedición no deberían ser tan altas ya que el castigo pena el “desbordamiento de los límites de orden públicos” y “el ataque a la solidez de los que se asienta la convivencia democrática”

Los presos de Junts y ERC eligieron el silencio ante la pregunta del Supremo sobre si querían el indulto. Jordi Cuixart de Ómnium Cultural fue el único que contestó elaborando que priorizaba la amnistía; dichas declaraciones expresan una posición antidemocrática para el Tribunal y titula de grave que Cuixar declarase que volvería a llamar a las manifestaciones recordando que no fueron ni pacíficas ni democráticas.

Asimismo, también atacó a los condenados que optaron por el silencio, incluso crítica que se les llame presos políticos ya que encabezaron una movilización para subvertir el orden constitucional. También fue contra las cárceles catalanas por su apoyo al indulto. Tras completarse el trámite del Supremo, ahora le toca proceder al Ministerio de Justicia de llevar la propuesta al Consejo de Ministros.