La rutina ideal para bajar los niveles de azúcar en sangre y perder peso

Nuestra salud física es tan importante que la ciencia no para de estudiar e investigar todos los procesos por los que pasamos a lo largo de nuestra vida. Gracias a ellos, se han hecho importantes descubrimientos que hoy en día nos han ayudado a conocer más sobre nuestro metabolismo, el papel de la glucosa en nuestro organismo y a resolver muchas interrogantes de por qué en algunos casos nos cuesta perder peso.

En este trabajo por conocer mejor nuestro cuerpo, se han dictado algunas estrategias básicas, no solo para perder peso de forma natural, sino especialmente para poder tener una mejor salud física y envejecer mejor. Entre estas estrategias se encuentran por ejemplo el adaptarnos a una dieta equilibrada y saludable, alejada del exceso de azúcares y grasas saturadas, así como la introducción en nuestra rutina diaria de ejercicios, que no necesitan ser intensivos.

Una mejor rutina de ejercicios para perder peso y estar más sanos

Los últimos avances en medicina, señalan la resistencia a la insulina y al estado de nuestra microbiota, como dos fuentes principales para entender por qué a algunas personas les cuesta más que a otras perder peso o tener uno más estable y sano. Un resiente estudio publicado en la revista de la Asociación Europea para el Estudio de la Diabetes (EASD), 'Diabetología', ha comprobado cuál es el mejor momento en el día para implementar la actividad física en nuestra rutina.

El estudio comparaba los mejores momentos en el día para hacer ejercicio y su impacto directo en el control del azúcar en sangre y en los trastornos metabólicos que se relacionaban con la obesidad y la diabetes. De esta forma pudieron determinar que las horas de la tarde o de la noche eran ideales para hacer ejercicio si lo que buscamos perder peso al reducir nuestra resistencia a la insulina, un trastorno que se genera ante la incapacidad de nuestro hígado para seguir gestionando azúcares.

Los ciclos horarios y nuestro hígado

Gran parte de los estudios modernos señalan a nuestro hígado como una de las principales claves para explicar la dificultad a la hora de perder peso. El ya conocido síndrome del hígado graso parece estar señalado constantemente. Este tipo de patología impide a nuestro hígado realizar su función de forma adecuada, lo que ala larga nos lleva a una acumulación excesiva de grasas en nuestro organismo, con los riesgos que eso supone, más allá del sobrepeso o la obesidad.

En diferentes estudios en animales, y aun muy pocos en personas, se está buscando la relación directa entre nuestros ciclos horarios y la capacidad para poder eliminar el exceso de grasas en nuestro hígado y de esta forma recomponer nuestro sistema metabólico, que es el que nos ayudará a perder peso si lo necesitamos. Estos estudios, mostraron que en las noches diurnas podemos hacer que las rutinas de ejercicios sean más eficaces para contrarrestar este efecto.