Descubre dónde deshacerte de forma correcta los test COVID-19 y de gripe sin llevarlos a puntos SIGRE

El "Punto SIGRE es un sistema que opera en las farmacias para recoger los residuos de medicamentos y envases que los ciudadanos pueden depositar para su reciclaje y tratamiento adecuado.

Este sistema tiene el objetivo de fomentar la correcta gestión de los residuos generados por los medicamentos que ya no se utilizan y sus envases.

En los Puntos SIGRE, los usuarios pueden depositar envases vacíos o con restos de medicamentos, así como medicamentos caducados o no utilizados. Sin embargo, en el caso de los test COVID-19 o de gripe, que contienen residuos biológicos, estos no deben ser depositados en estos puntos. En lugar de ello, deben ser desechados siguiendo las instrucciones locales para la eliminación de residuos sanitarios o biomédicos, evitando mezclarlos con los residuos habituales o los depósitos de SIGRE.

Entonces, ¿dónde se debe tirar el test de autodiagnóstico de la COVID-19 o la gripe?

Los protagonistas de estas navidades son los virus. Los casos de gripe, COVID-19, virus respiratorio sincitial (VRS) o resfriados comunes han sufrido un repunte en las últimas semanas en toda España.

Y aunque ya existían, en la pandemia la población descubrió los test de antígenos, disponibles para determinar una infección por SARS-CoV-2, pero también para la gripe. Unas pruebas que están siendo muy demandadas en las farmacias de todo el país. 

Pero una vez usados ¿qué debemos hacer con estos test? ¿Se pueden reciclar? ¿Los debemos llevar a la farmacia?

Para despejar esta duda, los responsables de SIGRE, entidad sin ánimo de lucro encargada de garantizar la correcta gestión medioambiental de los medicamentos caducados o no utilizados y sus envases que se generan en los hogares españoles, explican qué medicamentos o productos deben llevarse a la farmacia a reciclar y cuáles no. 

Pues lo primero que debemos tener claro es que estos test ya usados no deben llevarse al Punto SIGRE de nuestra farmacia ¿Por qué? Porque según entidad estas pruebas no son consideradas como medicamentos. 

Entonces ¿en qué cubo lo tiramos? Pues los expertos en reciclaje de medicamentos explican que estas pruebas se deben tirar en el cubo de basura normal, también llamada la fracción de restos, donde desechamos aquellos residuos que generamos en casa y que no pueden ser reciclados. 

• Pero antes de tirarlos no debemos olvidar introducir la placa de test, el botecito con el líquido y el palito con el que realizamos la prueba, en la bolsa con el signo de contenido biológico que acompañan al test. De esta forma se depositan con mayor seguridad en el contenedor de restos. “Bajo ninguna circunstancia estos residuos deben llevarse al Punto SIGRE, ya que no se tratan de un medicamento”, insisten desde SIGRE.

Eso sí, tanto la caja de estas pruebas, como los plásticos en los que vienen introducidos al ser de plástico y papel deben ser tirados en el contenedor correspondiente: el azul para las cajas de cartón y las instrucciones de uso, el amarillo para las bolsas de plástico, etc.

¿Qué productos sanitarios no se deben llevar a un Punto SIGRE?

Todos vamos acumulando medicamentos o productos sanitarios en casa. Pero cuando ponemos orden en el botiquín hay que tener en cuenta que no todo se puede reciclar en la farmacia. 

Para aclararlo, los expertos en reciclaje de productos sanitarios facilitan una lista sobre todo aquello que no debemos llevar a un Punto SIGRE: 

• Las mascarillas.
• Las agujas que acompañan a las jeringuillas.
• Los termómetros.
• El material de cura, como gasas o vendas.
• Los productos de nutrición que se venden en farmacias.
• Las sondas.
• Las radiografías.
• Los glucómetros.
• Los productos o reactivos químicos.
• Cualquier prueba de diagnóstico doméstico, ya sea de Covid-19, gripe o de embarazo o VIH.

Lo que sí debes llevar al Punto SIGRE de la farmacia

Lo que si se debe depositar siempre en el Punto SIGRE de la farmacia son los siguientes productos sanitarios: 

• Los medicamentos caducados o en mal estado de conservación.
• Aquellos medicamentos que nos han sobrado tras terminar el tratamiento, por ejemplo, los antibióticos. Todo ello, siempre dentro de su envase, con su caja y prospecto respectivos.
• Los envases vacíos de medicamentos. Los responsables de SIGRE señalan que es necesario reciclar también los fármacos que terminamos en su integridad, incluyendo cajas de cartón, blísteres de plástico o aluminio, frascos de vidrio, sobres, inhaladores, viales, tubos de pastillas, pomadas, etc. 

Y es que todos estos envases, “debido a que han estado en contacto con sustancias farmacéuticas y necesitan un tratamiento específico para proteger nuestra salud y el medio ambiente”.