Lectura fácil
En las profundidades de los Everglades, un lagarto overo argentino, también conocido como tegu, ha emergido como una especie invasora en Florida. Este reptil, que puede llegar a medir hasta un metro y medio, se ha extendido por el sur de Florida y otras áreas del sureste de EE. UU.
Originario de Sudamérica, el tegu es omnívoro y consume una amplia variedad de alimentos, desde huevos de animales hasta frutas y verduras.
Así es el lagarto gigante que ha aparecido en Estados Unidos
En los Everglades de Florida, el tegu argentino, un lagarto de gran tamaño con escamas moteadas, se ha convertido en una especie invasora que amenaza la biodiversidad local. Originarios de Sudamérica, estos omnívoros voraces han proliferado en el sur de Florida y el sureste de EE. UU., representando una amenaza para especies autóctonas y la agricultura.
Estas criaturas, conocidas por su apetito insaciable, consumen una variedad de alimentos, desde huevos de aves y reptiles hasta frutas y verduras. Su resistencia y adaptabilidad dificultan su control una vez establecidos. Aunque los esfuerzos recientes han tenido éxito en limitar su población en los Everglades y Georgia, el tegu ha llegado a condados de Georgia y Carolina del Sur.
La popularidad de los tegus como mascotas exóticas ha contribuido a su introducción en el medio ambiente. Aunque la mayoría proviene de criadores estadounidenses, el riesgo de su expansión persiste. Su presencia podría amenazar especies en peligro de extinción, como la serpiente índigo oriental y las tortugas de tierra, lo que ha llevado a la implementación de restricciones en algunos estados. La preocupación se intensifica debido a la posibilidad de que el cambio climático amplíe su área de distribución en Norteamérica.
¿Podrán detenerlos?
Los tegus, resistentes y adaptables, desafían los intentos de control. Pueden resistir bajas temperaturas y adaptarse rápidamente a amenazas como la caza. En los años 80, fueron explotados a gran escala, pero su resistencia evitó la extirpación local.
Para frenar su propagación en EE. UU., las autoridades implementan estrategias. En 2020, se capturaron más de 900 especies en el sur de Florida, mostrando resultados prometedores. En Georgia, biólogos estatales informan de menos tegus, sugiriendo que la detección temprana podría marcar la diferencia.
Aunque persisten desafíos, los esfuerzos para controlar la población de estas especies están en marcha, ofreciendo esperanza en la lucha contra esta invasión reptiliana.
La lucha contra la invasión de tegus en Georgia
Hallar nuevos hogares para los tegus en Georgia implica la participación activa de los residentes. La Sociedad de Reptiles de Georgia ha implementado campañas de concienciación y un Grupo de Trabajo sobre Tegus, alentando a los residentes a informar avistamientos sospechosos. Los voluntarios atrapan a estos animales identificados y los llevan a centros de rescate, donde luego son entregados a personas interesadas en tenerlos como mascotas.
El aumento en las entregas se atribuye a la ley de 2022 en Georgia, que requiere licencias y microchips para los tegus cautivos. La Sociedad de Reptiles de Georgia se esfuerza por rescatar y realojar a estos animales de manera humana, aprovechando la demanda de personas que desean adoptarlos como mascotas.
Aunque se trabaja activamente en soluciones, los expertos subrayan la importancia de prevenir la propagación. Algunos estados, como Alabama, han prohibido la importación de los mismos, y otros podrían seguir su ejemplo. Mientras tanto, se desaconseja la tenencia de estos reptiles, y la sociedad enfatiza la responsabilidad en su cuidado para minimizar el impacto negativo en la naturaleza.
Aunque la situación aún no está completamente resuelta, diversas organizaciones y grupos privados trabajan en conjunto para encontrar la mejor solución para todas las partes involucradas.
Añadir nuevo comentario