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La práctica del yoga facial está firmemente establecida y, en las últimas décadas, su popularidad ha ido en aumento en todo el mundo. Al igual que el yoga corporal, esta disciplina combina técnicas de yoga con ejercicios específicos para la cara. Se ha demostrado que el yoga facial puede ser beneficioso para reducir el estrés y la tensión, mejorar la circulación sanguínea y fortalecer los músculos faciales, manteniendo un rostro más terso.
En uno de sus videos en su canal de YouTube, la experta en cosmética y belleza de la piel, Eva Rogado, explica que el yoga facial: “es una técnica que se basa en los principios del yoga para mejorar el aspecto del rostro. Tonifica los músculos faciales, trata arrugas y bolsas, actuando sobre la mímica facial con fines estéticos.”
Beneficios del yoga facial
La práctica del yoga facial tiene beneficios tanto para la salud mental como para la física, según destaca la marca de productos para la piel Lullage. Ayuda a aumentar la autoestima y reducir el estrés. En cuanto a los beneficios físicos, aporta flexibilidad a la piel facial, elimina la flacidez, estimula la circulación sanguínea y fortalece los músculos del rostro y el cuello.
Una gran ventaja de este método es que podemos obtener resultados rápidamente con poco esfuerzo. Según Linda Rosaschino, experta en belleza y profesora de yoga, se necesitan solo 10 días para comenzar a notar mejoras. "La cara tiene 70 músculos que permiten todas las expresiones faciales. Al igual que los músculos del resto del cuerpo, un buen entrenamiento es clave para mantenerlos tonificados, vitales y desafiantes frente al paso del tiempo y la gravedad", explica.
¿Cuánto tiempo hay que dedicar?
Para lograr un rostro en forma, joven y radiante, se recomienda dedicar entre 10 y 15 minutos diarios a los ejercicios faciales, según Lullage. Es importante tener en cuenta que este tiempo debe ser menor que el dedicado al ejercicio corporal, ya que los músculos faciales son diferentes y pueden fatigarse fácilmente. También destacan la importancia del descanso, por lo que se sugiere practicar yoga facial una vez al día y realizar cuatro sesiones a la semana.
Para comenzar la práctica de yoga facial diaria creamos una lista para que puedas comenzar a integrarlos en tu rutina.
5 ejercicios para tu rutina
- Ejercicio para la papada: Presiona el hueso de la mandíbula con el puño desde abajo hacia arriba, evitando crear arrugas, mientras sacas la lengua y mueves los ojos. Mantén esta posición durante 10 respiraciones y luego repite el mismo ejercicio en el otro lado de la cara. Puedes aplicar aceites o cremas para facilitar el movimiento.
- Ejercicio para el entrecejo: Sostén las cejas con tus dedos y frunce el entrecejo para fortalecer los músculos de esta zona facial. Realiza tres series de 10 repeticiones de este ejercicio.
- Ejercicio para reducir las bolsas de los ojos: Pon los dedos índices de cada mano sobre las cejas para evitar arrugas y coloca los corazones de las manos bajo los ojos para mejorar el drenaje. Luego, con los párpados cerrados, levanta los ojos hacia arriba. Repite este movimiento 10 veces.
- Ejercicio para eliminar las líneas nasogenianas: Para reducir las líneas nasogenianas, que van de la nariz a la comisura de la boca, estira el músculo de la zona profundamente con tus dedos. Luego, aplica un aceite facial y haz un masaje hacia afuera. Repite este proceso unas 8 veces.
- Ejercicio para estirar labios y cuello: Inicia inclinando suavemente la cabeza hacia atrás y, mientras mira hacia arriba, simula dar un beso. Repite este gesto 10 veces, haciendo el sonido del beso. Luego, relaja tu rostro y respira profundamente. Al exhalar, imagina que soplas una vela, presionando ligeramente los labios. Relájate y repite este proceso dos veces más.
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