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La seguridad privada es un sector que ha contado con algunos requisitos de admisión algo polémicos hasta ahora. La mayoría de estos requisitos, como es lógico por el tipo de trabajo, han tenido que ver con las aptitudes tanto físicas como psicológicas de los candidatos, sobre todo si estos acceden a puestos en los que portar armas de fuego es necesario.
Sin embargo, los certificados que acreditan estas competencias, no eran expedidos a personas con enfermedades como la diabetes o el VIH, lo que suponían una automática eliminación en la selección de perfiles.
Desde asociaciones, tanto de unos como de otros, han trabajado intensamente para que estas patologías dejasen de ser excluyentes. La semana pasado, el Boletín Oficial del Estado publicaba un Real Decreto para que enfermedades como la diabetes o el VIH dejasen de ser motivos de eliminación para obtener el certificado psicofísico necesario para integrarse en cuerpos de seguridad privada. Un decreto que ya se prometió en 2022.
Diabetes o VIH ya no serán impedimentos para acceder a puestos en la seguridad privada
En el año 2022, el ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska, anunciaba que: "Llega tarde pero llega", refiriéndose al cambio de la normativa que hasta el momento "recogía el VIH como causa de exclusión para la tenencia de armas en este ámbito necesaria para la obtención del título". Un importante escollo para todas aquellas personas que buscaban acceder a puestos de trabajo en la seguridad privada, ya que este título forma parte de los requisitos esenciales.
Lo hizo durante la jornada organizada por la División de Control de VIH, ITS, Hepatitis Virales y Tuberculosis del Ministerio de Sanidad, '4 años de Pacto Social por la no discriminación y la igualdad de trato asociada al VIH'. También añadió que: "La norma tenía referencias obsoletas y discriminatorias con las personas con VIH. Ahora se adapta a la que ya está vigente para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado"..
Entre otras cuestiones, los avances en la medicina y los tratamientos de estas patologías que anteriormente resultaban inhabilitantes en algunos aspectos físicos, han permitido acabar con un importante escollo para que muchas personas puedan acceder a otros tipos de trabajo, no solo en la seguridad privada, sino también en la del Estado. Por su puesto, el trabajo de sensibilización de la sociedad para acabar con los estereotipos también ha sido esencial.
Algunas salvedades
El Consejo de Ministros ha puesto ya en marcha este cambio en el decreto, pero ha aclarado que existirán algunas salvedades para que las causas médicas supongan un impedimento para alcanzar los requisitos necesarios para poder trabajar en el sector de la seguridad privada.
Salvedades que solo aparecen en el momento en el que se aporte un informe médico individualizado que considere que la persona en cuestión no cuenta con las suficientes capacidades de salud para poder mantener un servicio en la seguridad privada o portando un arma.
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