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La pandemia ha traído otro gran desafío: llevar mascarilla con gafas y que éstas no se llenen de vaho e impidan ver y conviertan en más molesta la situación de tener que llevarla puesta.
Y es que, llevar mascarilla con las gafas empañadas, parecerá una tontería, pero supone un grave riesgo de sufrir un accidente, en caso de ir conduciendo o caminando por la calle.
Cada vez que exhalamos, ese aliento cálido sube hacia arriba, colándose por la parte superior de la mascarilla, y acaba por encontrarse con las gafas.
Como este objeto se encuentra a una temperatura más fría, sucede la condensación, para entendernos mejor, ocurre que los cristales se empañan.
Claro que podemos quitarnos las gafas, limpiarlas y volverlas a colocar en su sitio, pero esta acción acaba por volverse engorrosa durante todo el día, e incluso puede ser peligrosa en casos de conducción, ya que tienes que ir atento a lo que se presenta por la calzada.
Estas son la claves para llevar mascarilla sin que aparezca el molesto vaho que nos cubre las gafas
Además, al tener que estar quitándolas y tocándolas constantemente, también se convierte en un canal por el que podemos contraer la infección por coronavirus.
Es por ello que desde el canal Science Alert nos dejan unos pequeños consejos de manos de expertos para llevar mascarilla con gafas lo más cómodamente posible.
Llevar mascarilla con gafas ha supuesto todo un reto para todas aquellas personas con lentes. Incluso aquellos que llevan gafas de sol, pueden servirse de estos sencillos consejos:
- Jabón y agua: lavar las gafas con agua y jabón, y después secarlas con un paño de microfibra para no rallarlas. El jabón reduce la tensión superficial, evitando que el vaho quede pegado a los cristales, tal y como explican desde el Colegio de Cirujanos de Inglaterra.
- Espuma de afeitar: Aplicando una capa fina de espuma de afeitar en el interior de las gafas para luego limpiarla de forma suave con un paño de microfibra. El producto que queda en las lentes les crea una fina capa que las protegerá de que se empañen.
- Spray antivaho: En el mercado podemos encontrar productos especiales que evitan el molesto vaho que se forma en las gafas. Pero hay que asegurarse de que dicho spray es compatible con el tipo de lentes que utilizamos, por lo que es recomendable comprarlo en una óptica.
- Al llevar la mascarilla quirúrgica evitar huecos: En algunas ocasiones 'más vale maña que fuerza', por lo que la clave está en amoldar la mascarilla todo lo posible al puente de la nariz. De esta forma conseguiremos cerrar el espacio que puede quedar en la parte superior de la cara y evitar el paso del aire caliente de la exhalación.
- Cinta adhesiva especial: Otros profesionales sanitarios utilizan una tira de cinta ahesiva que está especialmente diseñada para usar en la piel. Colocándola justo en el borde superior de la mascarilla consiguen cerrar bien esa parte e impiden que el aire vaya hacia las gafas.
- Tela húmeda: situando un pañuelo o un trozo de tela húmeda debajo del borde superior de la mascarilla conseguimos el mismo efecto, evitando que nuestra respiración empañe los cristales.
Ya sabes cómo llevar mascarilla con gafas, acuérdate muy bien de estos sencillo consejos para que tu vista y tu organismo vayan correctamente protegidos, libres de obstáculos.
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