Las 5 lesiones deportivas más comunes y cómo prevenirlas

Los beneficios del deporte son innumerables. Van desde la mejora de nuestra salud física, pasando por nuestro aspecto y tocando temas más importantes como la salud mental o la longevidad. Sin embargo, cuando realizamos actividades físicas, podemos estar expuestos a sufrir lesiones deportivas, incluso sin necesidad de realizar deportes de alto impacto, aunque en estos hay más probabilidades obviamente.

La mejor forma de evitar las lesiones deportivas más comunes

A pesar de que es común sufrir lesiones deportivas, podemos recurrir a algunos mecanismos para prevenir las más comunes y de esta forma reducir ampliamente el riesgo. Los expertos recomiendan acciones tan sencillas como realizar ejercicios de calentamiento previos, que suelen estar especialmente pensados para abrir las articulaciones y preparar a los músculos. Por supuesto los estiramientos también son esenciales, tanto en el calentamiento como después de ejercitarnos.

Estas pequeñas acciones pueden contribuir enormemente a prevenir las lesiones deportivas más frecuentes, como las que te mencionamos a continuación:

Calambres musculares

Los calambres musculares pueden resultar altamente dolorosos y dejar la zona afectada adolorida cuando se pasan. Se producen principalmente por que el músculo sufre una hiperactividad, o también por un déficit a la hora de reponer sales minerales, por lo que la hidratación es imprescindible al realizar actividad física, sobre todo si son más intensas de lo habitual.

Tendinopatías

La tendinitis, como popularmente se las conoce, es una de las lesiones deportivas más comunes y molestas que hay. Se debe a la inflamación de los tendones y puede llegar a cronificarse si no se corta o trata a tiempo. Las más comunes suelen darse en el talón o las muñecas. Entre los síntomas se encuentra el dolor, la inflamación y la pérdida de movilidad.

Esguince de tobillo

Las lesiones deportivas también pueden llevarnos a pasar periodos sin poder realizar deporte, sobre todo si los músculos se ven tan afectados que necesitan de reposo, como es el caso de los esguinces. Los de tobillo son los más populares, aunque pueden darse en más zonas. Se producen por las microrroturas de los ligamentos y su intensidad puede variar según la lesión. Es importante ser precavido si nos ejercitamos en superficies inestables.

Desgarro muscular

Con solo el nombre podemos intuir que se trata de una de las lesiones más dolorosas a nivel muscular. Suele darse con mayor probabilidad en las extremidades inferiores y consiste principalmente en la rotura de las fibras musculares. Puede llegar a darse por algún golpe o una contracción más brusca de lo habitual en el músculo.

Fracturas

Terminamos con una de las lesiones deportivas más serias que podemos llegar a sufrir. Las fracturas en los huesos pueden venir derivadas tanto de caídas, golpes contra objetos más duros que nosotros, o incluso por mantener una actividad muscular demasiado intenta durante un periodo extenso de tiempo. Su recuperación y tratamiento es de las más tediosas, e incluso puede llegar a requerir cirugía, por lo que es mejor ejercitarnos con cabeza para evitarlas.