Marta Arce: “Hay personas faltas de empatía y eso también es una discapacidad"

La judoka paralímpica Marta Arce comenzó a practicar esta disciplina en la Escuela de Fisioterapia de la ONCE donde tenía varios compañeros que practicaban esta disciplina. Su debut se dio en los Juegos Paralímpicos de Atenas 2004.

En GNDiario hemos disfrutado de una charla con la judoka donde hablamos sobre los diferentes Juegos en los que ha tenido la oportunidad de participar: “Desde un punto de vista informativo, los Juegos Paralímpicos con más seguimiento fueron los de Londres 2012”.

Marta Arce ha destacado que de los Juegos Paralímpicos de Londres había mucho que aprender porque allí se inició el movimiento paralímpico. Además, también ha puntualizado que durante los Juegos Paralímpicos de Río 2016 ella podía elegir los deportes a través de RTVE A la Carta: “Yo recuerdo poder ver a mis compañeros competir. Creo que mi competición ha sido imposible verla. Cuando me clasifiqué para la final pusieron los combates de la sesión de la mañana y lo emitieron después. No pudo verse la competición porque había que apuntarse a través de una plataforma de otro país”.

Marta Arce comenzó a hacer deporte en Madrid

Pese a que Marta Arce nació en Valladolid, gran parte de su vida ha vivido en Madrid. De hecho, allí comenzó a practicar deporte. Las ganas de hacer deporte se presentaron en la Universidad cuando tuvo la oportunidad de hacer judo adaptado. “Había intentado hacer deportes pero como no sabíamos adaptarlos bien y no sabíamos la manera de adaptarlo acababa en cosas muy frustrantes”.

Se pudo sacar la carrera porque estudió en la Escuela de Fisioterapia de la ONCE. “Allí está todo adaptado y cuando vamos a hacer prácticas nos conocen. Yo tengo resto visual pero hay otros fisioterapeutas que no ven nada”. Ellos hacen sus prácticas y son igual de profesionales que cualquiera.

Empezó a practicar este deporte gracias a gente de su carrera y le gustó. De ahí me empezó a gustar el deporte, vi que este lo podía hacer y se me daba muy bien. La única diferencia que hay entre el judo adaptado y el judo paralímpico es la manera de comenzar. En el judo olímpico están separados a 2 metros y en judo paralímpico comienzan agarrados.

A partir de ahí, para los judokas no hay muchas más diferencias. Las diferencias han de aprendérselas los árbitros. Entre ellas, destacan las de saber posicionarse en el tatami, tiene que avisar cuando van a salirse los judokas… Tampoco debe perder la concentración sobre la acción. “Nosotros tenemos que ir hacia su voz. Si nos vamos a salir, el árbitro nos va a advertir diciendo Yogai en varias ocasiones”.

Marta Arce destaca que la mejor cobertura de unos Juegos Paralímpicos se encontró en Londres

La judoka paralímpica, Marta Arce, ha destacado que los que mejor cobertura tuvieron fueron los de Londres 2012 ya que “los deportistas se encontraban en la cuna del movimiento paralímpico”. Gracias a ello, los deportistas paralímpicos son tratados de igual manera que los deportistas olímpicos. “Arrastraron al resto del mundo a darles la misma importancia”.

En Pekín, se hizo bastante seguimiento pero, en Atenas 2004, Marta Arce llegó a salir en las noticias de la noche pero según comenta recuerda que “al día siguiente dimitió el Seleccionador nacional de Fútbol”. Declara entre risas que, hubo un bombazo en fútbol y se acabaron los Juegos Paralímpicos.

Otra de las anécdotas que Marta Arce recuerda es que en medio de la celebración de  la ceremonia de los Juegos Paralímpicos de Londres o Pekín, contraprogramaron la apertura de este evento por la emisión de otro evento. “El jefe de prensa del Comité Paralímpico Español se volvió loco con la decisión”.

¿Qué pesa más en este tipo de decisiones: Sociedad o Educación?

Tras contraprogramar un evento de estas características como la apertura de unos Juegos Paralímpicos, llegamos a una conclusión: “Hoy en día está mal visto decir que algo no te interesa dentro de esta índole porque quedas muy mal. Tengo la sensación de que si pueden se lo quitan de encima”. A partir de aquí, ¿cuánta parte de culpa podemos achacar a la Sociedad y cuánta a la educación que los niños puedan recibir?

Para Marta, la culpa es una palabra muy fuerte y es necesario poner la vista en el futuro. “La responsabilidad recae en la educación ya que, a las generaciones más mayores es difícil cambiarles la manera de pensar”.

Sin embargo, los niños “son como esponjas”. Además se hacen muchos trabajos sobre talleres de emociones que son muy útiles para trabajar otros aspectos no académicos del desarrollo de los niños donde van incluidas estas cosas. “Esto va a hacer que las cosas sean distintas y mejores que ahora”.

¿Qué pasaría si un niño con discapacidad necesita una adaptación curricular para hacer Educación Física?

La judoka paralímpica, Marta Arce, además de deportista con discapacidad es madre de 3 hijos. Aunque ninguno de sus hijos tiene discapacidad, nos hemos querido hacer esta pregunta: ¿qué pasaría si un niño con una discapacidad que le impide hacer algunas acciones, no puede hacer Educación Física?

Arce lo tiene bien claro: “En este tipo de aspectos entran dos cosas. La primera es que una persona con discapacidad física necesite una adaptación curricular en Educación Física tiene derecho a tenerla. Ya no es algo que el profesor de Educación Física pueda decidir no hacer. Otra cosa es que esté preparado, sepa hacerla, que quiera hacerla y le dé la gana hacerla”.

“Hoy en día, las personas con discapacidad están a merced de la lotería que les toque un profe implicado, con ganas, motivado, que esté formado (y que si no esté formado se preocupe por formarse). La otra opción es que les de igual y digan “hazme un trabajo sobre la normativa del baloncesto” y no se molesten porque ni saben ni quieren ni se molestan ni les interesa”. Hay personas que tienen sensibilidad para poder concienciarse y otras que no. “Hay personas faltas de empatía y eso también es una discapacidad. También hay que aceptarlas en la sociedad”.

Marta Arce se ha retirado. ¿A qué se dedica ahora?

Marta sigue vinculada a la fisioterapia. Ahora trabaja en una residencia de ancianos como fisio. Además también entrena aunque a un ritmo más bajo porque ha metido escalada y esquí adaptado. La escalada la realiza en un sitio especializado se pone el seguro y a partir de ahí a continuar escalando. “Procuro no tocar las presas que no tengo que tocar pero hay veces que no las distingo”.

Para escalar se ayuda por el tacto y por su vista y ha explicado cómo se desenvuelven los escaladores en las competiciones paralímpicas: “En las competiciones no hay más presasque las que puedes tocar. No es como en el rocódromo que tienes que estar pendiente de seguir tu color.

Tras retirarse, la vida de Marta pasa por su trabajo de fisio con la tercera edad como ella define “uno de los sectores más agradecidos”. Sin problemas. Lo más importante como todo es estar bien formado. Aunque parezca que es una mezcla entre tacto y vista, otro aspecto que destaca Marta es la práctica, que es uno de los aspectos que más valora de la Escuela de Fisioterapia de la ONCE.