Cómo informar a los más pequeños sobre las personas con discapacidad

La diversidad es un algo muy común y presente en todos los aspectos cotidianos de nuestra vida, también en los más pequeños de la casa, que comienzan a sociabilizarse con otros niños en las escuelas o parques. Durante ese momento de ocio, los niños también entran en contacto con personas con discapacidad, algo que, en muchos aspectos, les causa varias preguntas.

Algunos consejos previos para explicarle a los niños qué es la discapacidad

Un aspecto clave es que los niños pequeños no tienen apenas prejuicios, por lo que relacionarse y sensibilizarse con el que tienen al lado, no les supone un problema. A diferencia de los niños, los adultos son menos conscientes de la existencia de estas situaciones, algo que deberían aprender de las personas que tienen a su lado.

Es curioso, un niño detecta de manera rápida cunado una persona tiene algún tipo de “dificultad” a la hora de realizar cualquier actividad, lo que lleva al menor a realizar preguntas sinfín, algo que hace sin ninguna intención, solo curiosidad.

A la hora de responder a sus grandes preguntas, lo mejor es abordar el tema como cualquier otro que se pueda tratar en casa o fuera de ella. Se trata de una acción basada en la empatía y el reconocimiento de las personas con discapacidad en cualquier ámbito del día a día. Por estos motivos, es importante concienciar a los más pequeños y lograr establecer una situación de armonía y entendimiento.

Los mejores consejos para conseguir una situación positiva con los niños

Lo más importante a la hora de hablar sobre las personas con discapacidad es insistir en que las personas no se definen por su capacidad ni características físicas o mentales, sino por la persona que es. Simplemente, hablar sobre las dificultades a las que se enfrentan a la hora de realizar algún movimiento o tarea. Existen también materiales educativos que pueden ayudar a obtener respuestas positivas ante este tema.

Algunos consejos para lograr un gran éxito comunicativo:

1. Utiliza un leguaje inclusivo. Es importante cuidar la terminología que utilices, e intentar no transmitir desprecio o inferioridad.
2. Responde a las preguntas abiertamente. Cuando los niños pregunten acerca de las personas con discapacidad o el término en sí, responde de manera natural, sin juicios de valor.
3. Insiste en las similitudes. Quizás se trate de un elemento de vital importancia a la hora de hablar sobre personas con discapacidad. Procura resaltar lo que nos une y no lo que nos separa, menciona todo lo que existe en común.
4. La discapacidad a través de juegos y cuentos. Como hemos mencionado anteriormente, existen métodos educativos para recurrir en el caso de que no sepas cómo llevar del todo la situación. Por ejemplo: “Lucas tiene superpoderes” o “La tortuga Marian”.
5. Lo más importante, da ejemplo. Recuerda que los niños son como esponjas, por lo que probablemente, repetirán tus actuaciones. La forma en la que hablemos de las personas con discapacidad terminará afectando a la idea del niño.

Es de vital importancia que la ideología salga de ti, de tu entorno, y no de los menores. Gracias a ella podrás conseguir que las personas con discapacidad y todo lo que les rodea avancen en un mundo libre de prejuicios y discriminación.