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Las personas con discapacidad tienen que participar de manera efectiva e igualitaria en la reconstrucción social y económica tras el COVID-19.
Así lo han reclamado expertos independientes de Naciones Unidas. Dicha reclamación va dirigida a los Estados miembros, y surge con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, que se celebra hoy, 3 de diciembre.
En un manifiesto, destacaron el especial impacto de la pandemia en este colectivo, y subrayaron la poca atención mostrada hacia sus opiniones durante esta etapa y sus especiales problemas de acceso a la información y a la salud.
Las personas con discapacidad han quedado relegadas durante esta pandemia, sin tener en cuenta sus problemas ni sus opiniones
Según Danlami Basharu, portavoz del Comité de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, la pandemia ha puesto en evidencia "la debilidad de los avances logrados en las últimas dos décadas" por este colectivo.
Por eso, según Basharu, los estados deben “mitigar de inmediato sus efectos a corto plazo y asegurar una mejor planificación, para que en las futuras crisis nadie se quede atrás”.
“Uno de los aprendizajes más evidentes tras estos meses de pandemia tiene que ver con la escasa participación de las organizaciones de personas con discapacidad en la respuesta a la crisis”, agregó el portavoz.
A su juicio, “hubo problemas que eran perfectamente predecibles pero se obviaron por no consultar a estas personas y a sus representantes”.
Danlami Basharu destaca que al haber obviado dichos problemas se limitó "la eficacia y la efectividad" de las medidas adoptadas.
El relator especial de este mismo Comité, Gerard Quinn, reclamó "un enfoque de derechos humanos para garantizar sociedades justas, sostenibles y resilientes, que reconozca la urgencia de garantizar una educación de calidad y en igualdad de condiciones".
La pandemia ha afectado a todos, pero mucho más a este colectivo, que además se ha visto impulsado al abismo con la enorme brecha digital y la gran falta de accesibilidad que se ha intensificado durante el aislamiento.
La falta de accesibilidad informativa y comunicativa es un problema que se debe resolver con urgencia
Para la enviada especial sobre Discapacidad y Accesibilidad del secretario general de la ONU, María Soledad Cisternas, "otra lección que nos deja esta crisis es la necesidad de mejoras en todo lo que tiene que ver con el acceso a la información y a la comunicación" por parte del colectivo.
La enviada especial también cree que ha quedado en evidencia “la fragilidad de las prestaciones sociales”, y denunció la marginación de las personas con discapacidad y de otros grupos vulnerables de los servicios de asistencia e, incluso, de los sistemas de salud y de educación.
Finalmente, resaltó "el aumento del aislamiento y de la violencia hacia las personas con discapacidad, sobre todo hacia mujeres y niñas con discapacidad".
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