Placas solares en pantanos: el nuevo plan del Gobierno de España

En las próximas semanas, varios pantanos y embalses del país, 100 para ser exactos, contarán con numerosas placas solares sobre la superficie del agua. Esta es una de las medidas que ha decidido tomar el Gobierno de España para aligerar la transición energética en la que España está inmersa.

En nuestro país, tan solo una explotación de energía solar cumplía estas características. Sierra de Brava (Badajoz) dejará de ser tan especial.

Además, esta medida también forma parte del Real Decreto relativo a la implantación "urgente" de medidas para paliar el gran impacto económico que está teniendo la guerra en Ucrania en la economía del país. Por ello, el Estado ha dado luz verde a la implantación de placas solares y explotaciones fotovoltaicas sobre aquellos espacios hídricos de propiedad estatal que cumplan con los requisitos.

Placas solares sobre agua, mejor rendimiento

El funcionamiento de las placas solares, cuando éstas se encuentran sobre una superficie acuática, no se diferencia mucho del funcionamiento de las explotaciones fotovoltaicas que se encuentran sobre suelo terrestre. Como es lógico, estos paneles no se encuentran a la deriva, desplazados por las corrientes o las ráfagas de viento, sino que se encuentran anclados para asegurar su orientación sur.

Aunque el funcionamiento sea muy parecido, la instalación de placas solares sobre el agua cuenta con algunas ventajas y beneficios. El primero de ellos es la existencia de humedad, ya que ésta disminuye la temperatura del entorno y aumenta la eficacia de la explotación fotovoltaica. Cada grado centígrado que aumenta la temperatura, la instalación recibe un 0,36 % menos de radiación.

Además, la existencia de placas solares en ecosistemas acuáticos hace que, las sombras generadas por los mismos paneles, disminuya la evaporación del agua. Esto previene la aparición de algas en los pantanos y estanques, previniendo también la aparición de especies invasoras que destruyan el ecosistema.

La ganadería y la agricultura, beneficiadas

Las macrogranjas tradicionales de energía solar necesitan de superficies muy extensas para poder domar el sol. A la hora de instalar una gran cantidad de placas solares, es necesaria la existencia de una gran superficie terrestre donde esta actividad pueda llevarse a cabo.

La existencia de macrogranjas suele ir ligada a efectos colaterales para el suelo donde ésta es instalada. Efectos colaterales como la pérdida de riqueza del suelo que, sin ninguna duda, afectan a otro tipo de industrias y economías como puede ser la ganadería y la agricultura.

Por ello, otra de las ventajas del nuevo plan del Gobierno de España de instalar explotaciones fotovoltaicas en pantanos y estanques es que el conflicto entre estas industrias disminuirá, y la ganadería y la agricultura, muy importantes en nuestro país, se verán beneficiadas.

Por su parte, las explotaciones fotovoltaicas pasarán a estar instaladas en lugares donde, por lo general, no existe ninguna industria anexa. Es cierto que existen pantanos y estanques del país en los que se desarrollan actividades de recreo u ocio, pero la implantación de las macrogranjas acuáticas no supondrá ningún problema. Esto se debe a que, según ha publicado el Boletín Oficial del Estado, las compañías eléctricas tan sólo podrán hacer uso del 5 al 20 % de la extensión del pantano.