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El famoso torneo del Toro de la Vega en la localidad de Tordesillas, en Valladolid, se celebra por primera vez con encierros tradicionales, pero sin muerte ni arponcillos hacia el animal. Este hecho ha causado furor entre la población y los animalistas.
Toro de la Vega: encierro sin incidentes y bajo un debate jurídico y administrativo
Después de tres años desde la celebración de los famosos encierros de la localidad de Tordesillas, en Valladolid, el festejo del Toro de la Vega ha vuelto a recorrer las calles este martes. Sin embargo, el festejo taurino ha sido totalmente distintos en comparación a los años anteriores debido a un debate jurídico, administrativo y sobre todo social.
Esta nueva polémica taurina surgió entre el partido animalista y el propio Ayuntamiento de Tordesillas debido a la denuncia por parte del PACMA el pasado lunes. La organización consideró que la autorización de Castilla y León para este encierro en concreto, Toro de la Vega, no cumplía con la antelación mínima del Reglamento de Espectáculos Taurinos Populares de la comunidad.
Tras la solicitud, el Ayuntamiento de Tordesillas insistió en la celebración de esta corrida al igual que en otras ediciones, pero esta vez sin la muerte pública del animal.
Por ello, la delegada de la Junta de Castilla en Valladolid, Raquel Alonso, informó a Efe sobre la autorización de este encierro: la modalidad de encierro urbano y de encierro mixto. Toro de la Vega sería el único protagonista.
El alcalde lo relaciona con una “presión mediática” y ataque al medio rural
Tras la suspensión del torneo con divisas, el alcalde de Tordesillas, Miguel Ángel Oliveira, ha achacado la decisión de esta celebración taurina a la “presión popular y mediática”: “Nuestra propuesta estaba avalada por veterinarios y especialistas en la materia donde en ningún momento se planteaba la muerte del animal en público”. Asimismo, Oliveira ha interpretado esta decisión del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León como “un ataque al medio rural, a nuestras tradiciones y a la tauromaquia en general”.
Por otro lado, el Toro de la Vega ha atraído a “grupos de alborotadores” durante el festejo, según Oliveira, antitaurinos y allegados al PACMA que “vienen a provocar la alteración del orden público”.
Un encierro sin incidentes
A pesar del gran debate que ha surgido a raíz del Toro de la Vega, el encierro se ha celebrado sin incidentes y con la participación de centenares de personas a lo largo de un gran recorrido desde la Cuesta del Empedrado hasta la desembocadura del río Zapardiel, en el Duero.
El único percance que se vivió durante el encierro fue la caída de una mujer desde una talanquera. La misma fue trasladada a un hospital debido a un traumatismo cervical, según han informado las fuentes de la localidad.
Mientras tanto, las corridas y encierros taurinos siguen protagonizando las fiestas más importantes de nuestro país, a la sombra de las numerosas protestas de organizaciones y entidades que velan por la protección de un animal tan típico en nuestro país como es el toro.
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