Desaladoras portátiles, una máquina altamente útil para llevar agua a lugares afectados por catástrofres

El agua potable es algo imprescindible. Tanto para hidratarse como para la higiene personal y la buena alimentación. Es por ello que las plantas desaladoras juegan un papel importante a la hora de dar un acceso total a un recurso vital.

Y es que los avances tecnológicos han hecho posible que surjan proyectos que se hacen realidad y facilitan la idea de poder llevar este recurso a lugares donde por ejemplo, se dan catástrofes naturales, como terremotos y demás.

Es por ello que celebrar este tipo de creaciones tan necesarias es vital, así como el apoyo para el fomento de su propulsión y reparto con el fin de poder hacer frente a la problemática de la escasez hídrica y de la falta de acceso a este recurso en regiones del tercer mundo.

Las desaladoras y su evolución cumplen un papel muy importante para hacer llegar el agua potable segura

El caso, es que el surgir de las desaladoras supone un gran avance para conseguir llevar agua potable a lugares donde no cuentan con ello, pero siempre hay obstáculos, ya que construir una, requiere de una inversión muy grande, y así es como surgieron las versiones portátiles.

Este tipo de desaladoras presentan tamaños muy diversos, pues podemos encontrar aquellas que podrían caber en un maletín, hasta otras enormes que podrían abastecer de agua potable a miles de personas.

Tal y como especifica Diario Sur, podemos encontrar algunas desaladoras tan potentes que podrían quedar introducidas dentro de contenedores como los que encontramos en los puertos, procesando así unos 25.000 metros cúbicos de agua salada.

Huelva y Madrid son las ubicaciones que han visto convertirse en realidad este proyecto, con la fusión entre la Sociedad Española de Tratamiento de Agua (SETA) y PHT.

Este avance tecnológico consigue que el agua potable y segura llegue a aquellos lugares donde más lo necesitan, como es el caso de zonas que han vivido una catástrofe, como erupciones volcánicas u otros acontecimientos de carácter natural.

La capacidad de un modelo de desaladoras con capacidad para 5.000 metros cúbicos, puede llegar a suministrar agua a un total de 41.000 ciudadanos.

Su funcionamiento puede estar listo en cinco meses, y tres de ellos corresponden a la fabricación de la maquina. Una vez terminado este principal paso, se procede al transporte, portándola al lugar donde se necesita el agua potable, con una instalación bastante fácil.

Una maquinaria capaz de transformarse para seguir respondiendo a las necesidades de una población creciente

Dada su naturaleza modulable, nos encontramos ante una maquinaria que permite que se vayan dando ampliaciones en cualquier momento, según vayan surgiendo las necesidades de la población, pudiéndose colocar en cualquier lugar, incluso directamente en el mar.

Según los expertos, el precio de las desaladoras pequeñas ronda los 700 euros al día por el metro cúbico, unos 350.000 en total y en el caso de la maquinaria más grande, por ejemplo de 5.000 metro cúbicos, el costo sería de 550 euros, unos 2,8 millones en total.