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Los productos que ingerimos en nuestro día a día pueden ser clave a la hora de conocer la salud de nuestro organismo. Es por ello por lo que muchas veces recurrimos a procesos de diagnóstico concretos, para conocer qué nos ocurre por dentro.
Una de las formas de conocer nuestra salud interna es analizar el color de las heces, ya que puede indicarnos si sufrimos alguna patología médica o no.
Nuestra alimentación es clave a la hora de conocer nuestro cuerpo
Analizar todo lo que comemos a lo largo del día puede ser clave a la hora de saber cómo se encuentra nuestro organismo de salud. Normalmente seguimos una dieta mediterránea, pero en ocasiones especiales solemos recurrir a alimentos que pueden ser dañinos para nuestro organismo.
Por esta razón, en muchas ocasiones recurrimos a procesos diagnósticos que se basen en el análisis de los alimentos.
A pesar de los diagnósticos, existen otras técnicas más avanzadas que pueden brindarnos desde el laboratorio, pero también hay técnicas más simples que pueden ayudarnos a saber más sobre nuestra salud y es el color de las heces.
Los expertos aseguran que saber el color de las heces puede ser de gran ayuda a la hora de saber más sobre nuestro cuerpo.
El color de las heces puede darnos pistas acerca de nuestra salud
Aunque para muchos parezca una tontería, el color de las heces puede ser clave para saber cómo está nuestra salud y qué hacer para mejorarla. Dependiendo del color, el problema será distinto:
- Marrón. Existen distintos tonos de marrón. Este color se considera normal en las heces y puede variar en función del alimento que consumimos. En el caso de que la consistencia sea anormal, es recomendable acudir a un médico.
- Verdoso. Un tono verdoso en las heces se debe a una dieta rica en vegetales o la presencia de colorantes en os alimentos. No suele ser una preocupación, pero muchas veces puede significar que los alimentos pasan muy rápido.
- Color claro, blanco o arcilla. Cuando se dan estos tonos en las heces puede ser resultado de ciertos medicamentos o debido a una falta de bilis en las heces. Esto puede ser causa de una obstrucción en las vías biliares.
- Amarillo. El color amarillo en las heces puede deberse a un exceso de grasa debido a un trastorno de malabsorción.
- Negro. El color de las heces también puede ser negro debido a suplementos, medicamentos o alimentos concretos. En caso de ser persistente se debe acudir al médico.
- Rojo. Las heces de color rojo son muy comunes y también puede ser debido a ciertos alimentos. En otras ocasiones puede indicar un sangrado en el tracto intestinal inferior por hemorroides. Aquí se debe consultar a un especialista.
A pesar de la multitud de situaciones que pueden aparecer y del color de las heces, siempre es importante tener en cuenta los hábitos de vida de cada persona de forma individual.
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