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Según va avanzando la vendimia de este 2023, los pronósticos para la cosecha de uva empeoran. En un principio los viticultores esperaban un descenso del 12 %, pero ahora las estimaciones rondan una caída situada entre un 20 y un 30 %.
El caso es que no por esta situación se está esperando que los precios de la uva vayan a subir.
Los causante de estas previsiones negativas han sido la sequía y las altas temperaturas que afectaron durante la primavera. Esta situación ha acabado por desembocar en una producción final por debajo de los 35 millones de hectolitros.
Las organizaciones agrarias explican como la cosecha de uva este año será negativa
Dichas previsiones sobre la cosecha de uva, se están dando antes de cortarse la variedad blanca airén, que es muy resistente al calor y a la sequía y la predominante en zonas como Castilla La Mancha.
Esta región concentra en sus campos la mitad del viñedo español, y marca la tendencia de la producción a nivel nacional.
Por su parte, el presidente de la sectorial vitivinícola de Cooperativas Agro-alimentarias de España, Fernando Ezquerro, indica que la producción final se quedará en la parte baja de las primeras previsiones que se hicieron, que hablaban de entre 35 y 36 millones de hectolitros.
"La sensación es de que el calor ha dejado la uva un poco tocada y ha perdido kilos", señala Ezquerro, quien también preside la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja, donde al principio vislumbraba "una buena cosecha de uva", aunque ahora ha empezado a "tener dudas".
Aunque diferentes expertos del sector opinan que las previsiones no serán tan malas como al principio, los datos dejarán a la cosecha de uva 2023 como una de las más cortas de los últimos años. Pero son cautos, porque el año pasado también se esperaba un año malo, que al final no resultó.
Los precios para la uva
La cosecha de uva, de momento, apunta un descenso de los precios según las regiones y la variedad:
Castilla La Mancha: El agricultor por esta cosecha de uva recibirá 0,0150 euros por kilogrado de la variedad mayoritaria de uva tinta tempranillo. Pero hay diferencias del destino de la uva, que se pagará a 4,50 pesetas (se listan en estas cantidades los precios en la región) el kilogrado si se trata de vinos de denominación de origen protegida (DOP).
El caso es que hay un excedente de vino tinto sin vender, pero la perspectiva de una baja producción para este 2023, el precio debería seguir como la campaña pasada. Pero falta por conocer a cuánto se pagará la variedad airén en la región, pero cabe destacar que los vinos tintos atraviesan una caída de consumo a nivel internacional y nacional.
Y es que, según Ezquerro, esto se ve en los precios para las variedades cabernet suavignon y tempranillo, que reflejan el desastre del mercado del vino tinto.
Pero en otras regiones, como en La Rioja, el precio de la cosecha de uva se mantiene o sube, girando en torno a los 75 céntimos por kilo. También en Cataluña, y según el destino de la uva, como es en esta región, para la elaboración de cava, los precios mejoran, situándose por encima de los 60 céntimos el kilo, que el año pasado se situaron en 45.
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