Repercusiones del boicot a marcas occidentales en el contexto de Gaza

Los boicots en Oriente Próximo contra marcas occidentales como Coca-Cola y KFC están reduciendo sus ingresos. Los consumidores, que acusan a estas empresas de apoyar a Israel en la guerra de Gaza, han provocado caídas significativas en las ventas en países como Egipto, Indonesia y Pakistán. Según el Financial Times, la situación está afectando especialmente a multinacionales y franquicias en la región.

Las marcas occidentales y el boicot en el conflicto de Gaza

Los boicots contra marcas occidentales en Oriente Próximo, como Coca-Cola, KFC y Starbucks, están impactando seriamente sus ingresos. Los consumidores en países como Egipto, Indonesia y Pakistán acusan a estas empresas de apoyar a Israel en el conflicto de Gaza, lo que ha llevado a una notable caída en sus ventas.

Según el Financial Times, empresas como Mondelez y L'Oréal también están sufriendo, con reducciones del 2 % en sus ventas y del 2 % en su crecimiento anual, respectivamente. Mientras algunas compañías eluden detalles sobre el impacto financiero, otras reconocen el problema.

Americana Restaurants, que opera franquicias de KFC y Pizza Hut, reportó una disminución del 40 % en sus beneficios del segundo trimestre en comparación con el año anterior, a pesar de abrir 81 nuevos restaurantes.

En Pakistán, el boicot contra productos vinculados a Israel ha tenido un impacto significativo en las ventas de Coca-Cola. En respuesta a la creciente presión de activistas islámicos, que realizaron protestas y bloqueos en Islamabad, el gobierno pakistaní prometió en julio formar un comité para identificar y boicotear los productos de empresas que "directa o indirectamente" apoyen a Israel o a su ejército.

Según el Financial Times, Coca-Cola İçecek, el embotellador local de Coca-Cola, ha visto una caída del 25 % en sus ventas durante el primer trimestre del año en comparación con el año anterior, aunque no se ha mencionado explícitamente la guerra en Gaza como la causa principal de esta disminución.

Otras marcas huyen del conflicto

Por otro lado, varias marcas occidentales están tratando de distanciarse del conflicto de Gaza para proteger su imagen. El director ejecutivo de McDonald's, Chris Kempczinski, comentó durante la presentación de resultados semestrales de la compañía que la guerra está "afectando negativamente" el negocio debido a la "desinformación" que afecta a sus operadores locales.

Starbucks, en Indonesia, ha hecho un esfuerzo consciente por aclarar que no tiene ninguna conexión con la guerra en Gaza. En Yakarta, las tiendas de Starbucks han colocado carteles que destacan que la empresa no tiene una agenda política y que no utiliza sus beneficios para financiar operaciones gubernamentales o militares.

Todas estas acciones subrayan el complejo desafío que enfrentan las marcas globales al intentar mantener una imagen neutral en medio de conflictos internacionales. Las empresas multinacionales deben navegar cuidadosamente entre las sensibilidades locales y las presiones internacionales para evitar el boicot y la pérdida de clientes en mercados clave.

En el contexto de alta tensión política, como el conflicto en Gaza, las percepciones de apoyo o neutralidad pueden tener un impacto profundo en la reputación y las ventas de estas marcas.