La OMS lanza una advertencia urgente para abordar la crisis de malnutrición en Sudán y proteger a millones de personas vulnerables

La OMS pide medidas urgentes para ayudar a 4,9 millones de personas en Sudán contra la malnutrición. 18 millones de personas, el 37 % de la población, sufren inseguridad alimentaria. La crisis de salud en esta región se agrava por la falta de comida, lo que podría tener consecuencias a largo plazo en la salud de la población.

La OMS hace un llamamiento para abordar la malnutrición en Sudán

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha lanzado un llamamiento urgente para abordar la grave crisis de malnutrición que afecta a unos 4,9 millones de personas en Sudán. Esta cifra representa aproximadamente el 37 % de la población, lo que refleja la magnitud alarmante de la inseguridad alimentaria en el país, que se ha visto agravada por lo que la OMS ha denominado "la mayor crisis de desplazamiento del mundo".

La OMS advierte que la malnutrición y el hambre aguda tendrán un impacto duradero en la salud de la población sudanesa, especialmente en los grupos más vulnerables. Para abordar esta crisis humanitaria, la OMS hace un llamamiento a la comunidad internacional para que intensifique y mantenga su apoyo, y así poder atender las necesidades urgentes de las personas más afectadas en Sudán.

Además de la malnutrición, la OMS alerta sobre el aumento del riesgo de brotes de enfermedades como el cólera y el sarampión, que podrían tener consecuencias devastadoras para los grupos vulnerables. Desde septiembre de 2023, se han reportado miles de casos de cólera en varios estados de la zona, con cientos de muertes registradas.

Los centros de salud se vuelven inoperativos

La malnutrición no solo afecta la salud física de las personas, sino que también tiene graves consecuencias en el desarrollo cognitivo y el bienestar emocional, especialmente en los niños. La falta de nutrientes adecuados durante los primeros años de vida puede llevar a retrasos en el crecimiento, debilitamiento del sistema inmunológico y aumento del riesgo de enfermedades graves.

Además, la malnutrición puede tener un impacto duradero en la sociedad y la economía de Sudán, ya que limita la capacidad de las personas para trabajar, estudiar y contribuir al desarrollo sostenible del país.

La crisis de acceso a servicios de salud esenciales también es alarmante en Sudán: entre el 70 % y el 80 % de los centros de salud en áreas afectadas por el conflicto no están operativos. Esto aumenta la presión sobre los pocos centros que funcionan y limita el acceso a atención médica vital, causando muertes evitables por enfermedades tratables.

Las embarazadas y los niños en el punto de mira

Las mujeres embarazadas y los niños son especialmente vulnerables debido a la interrupción de servicios de salud maternoinfantil y campañas de vacunación. Además, la crisis humanitaria, exacerbada desde abril de 2023, ha resultado en la mayor crisis de desplazamiento del mundo, con 8 millones de personas desplazadas, de las cuales 6 millones son internas y 1,8 millones han buscado refugio en países vecinos. 

Echando un vistazo a estos datos, la situación sigue deteriorándose y requiere una respuesta urgente y coordinada a nivel internacional.

Para abordar esta crisis, se necesita una respuesta integral que incluya medidas para garantizar la seguridad alimentaria, mejorar el acceso a servicios de salud y promover la educación nutricional en las comunidades afectadas. La cooperación internacional y el apoyo humanitario son fundamentales para proporcionar ayuda a quienes más lo necesitan y trabajar hacia soluciones a largo plazo para combatir la malnutrición en Sudán.