El té cuenta con multitud de propiedades cicatrizantes y anti-diarréicas

El té es una infusión preparada con las hojas secas molidas o brotes del arbusto camellia sinensis en agua caliente. Su consumo ha de ser moderado debido a que estimula el sistema nervioso, provocando elevar la tensión. 

Esta bebida originaria de China ha estado muy arraigada en India e Inglaterra siendo también una de las bebidas más consumidas en todo el mundo a raíz de los increíbles resultados que aporta.

Existen muchos beneficios atribuidos a esta bebida de origen chino

El té comenzó a consumirse por sus supuestos efectos beneficiosos y estimulantes, y hoy en día se ha convertido en una bebida más en nuestra dieta.

Si aún no conoces la cantidad de beneficios que encontramos en los diferentes tipos de té debes saber que cuentan con multitud de propiedades que resultan muy beneficiosas para nuestro organismo. 

Estos son algunos de ellos:

• Protege al sistema inmunológico.
• No tiene casi calorías.
• Posee antioxidantes.
• Ataca la anemia.
• Aporta hidratación. 
• Es diurético. 
• Reduce el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.

Efectos antioxidantes, ¿superan a los beneficios de la fruta y las verduras?

El té es fuente natural de flavonoides y catequinas, antioxidantes que protegen a las células y a los tejidos frente a los radicales libres, los cuales están relacionados con la aparición y desarrollo de alteraciones de la salud (problemas cardiovasculares, cáncer...). Sin embargo, una cosa son los efectos de estos compuestos cuando están aislados, y otra lo que ocurre cuando forman parte de un alimento. Si bien parece que el consumo de alimentos que contienen antioxidantes resulta beneficioso para nuestra salud, por el momento la EFSA no ha autorizado ninguna declaración que relacione consumo de té y efectos antioxidantes, pues se necesitan más estudios que confirmen este efecto (relación causa-efecto).

La cantidad de antioxidantes presentes en el té dependen de muchos factores: proceso sufrido hasta su comercialización, su variedad, cantidad usada, tiempo que está en el agua, etc. Sin embargo, no se sabe con claridad si son muchas las diferencias entre el negro y el verde, ni si superan o no la acción de las frutas y verduras.

Por lo tanto, es un error sustituir en la dieta las frutas y las verduras por el té, ya que además de antioxidantes, son una fuente importante de vitaminas, minerales y fibra, entre otras cosas.

¿Es tan bueno como parece?

Aunque en menor cantidad que el café, esta bebida natural contiene cafeína. Esta sustancia no solo tiene efectos beneficiosos, también tiene alguno perjudicial como el aumento del nerviosismo, taquicardia y puede causar irritación gástrica.

Por otro lado, a pesar de que esta bebida tiene un alto contenido en hierro, su consumo está desaconsejado en casos de anemia. ¿Y esto a qué se debe? El té contiene taninos que bloquean la absorción de este hierro.

La verdad es que ningún alimento soluciona los problemas por sí mismo, y sus efectos dependerán de la frecuencia y cantidad en la que se consuman, además de las circunstancias fisiológicas de cada persona.

Aprende a infusionar té 

Solo necesitas hojas sueltas de té y agua filtrada.

Tu primera decisión pasa por elegir la variedad de té que deseas. Si quieres un té enérgico que te despierte por las mañanas, aconsejo el Negro. Por el contrario, si esos kilos de más son lo que te preocupan, prueba con el Rojo o Pu-Erh. O quizá estás fascinado por las propiedades antioxidantes de esta bebida, tu infusión es el Verde. 

Si estas hojas sueltas que van a formar tu bebida crujen ligeramente, es que el proceso de deshidratación que se ha seguido para elaborarlo ha sido el correcto. Si no, cualquier ínfimo resquicio de humedad puede hacer que no se conserve bien.

Necesitarás unos 3 gramos por taza.

1. En una olla calentamos el agua que posteriormente añadiremos a nuestra tetera.
2. Vertemos el agua caliente en la tetera.
3. A continuación introducimos el té en la tetera.
4. Cubrimos la tetera y esperamos.
5. Lo retiramos de la tetera.
6. Echamos el líquido resultante en una taza.
7. ¡Listo para disfrutar!