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Planificar las vacaciones de verano puede no ser tan fácil como disfrutarlas, y puede resultar una tarea compleja, a menudo dependiente de las políticas y los procesos de aprobación de la empresa. Esto tiene importantes implicaciones tanto para los empleados como para los departamentos de RRHH. Según una reciente encuesta realizada por Personio, empresa líder en Europa en software de RRHH para pequeñas y medianas empresas, muchos empleados españoles buscan una mayor flexibilidad en este aspecto.
Los datos obtenidos en la encuesta entre más de 1.000 empleados revelan que sólo el 30 % está de acuerdo con la forma en que su empresa gestiona sus vacaciones. De hecho, al 38 % le gustaría tener más libertad para elegir cuándo coger sus vacaciones. Casi tres de cada diez españoles (27 %) consideran que nunca es un buen momento para pedir vacaciones, lo que puede tener que ver con un clima laboral que necesita mejoras.
¿Cómo gestionan las empresas el tiempo libre de los empleados?
En un mundo empresarial cada vez más impulsado por la eficiencia y la agilidad, resulta sorprendente que muchas empresas todavía confíen en métodos tradicionales y manuales para gestionar las solicitudes de vacaciones de sus empleados. Los correos electrónicos, por ejemplo, siguen siendo una herramienta comúnmente utilizada para este fin, pero su eficacia deja mucho que desear. Esta dependencia de métodos obsoletos puede desencadenar una serie de problemas, desde retrasos por falta de aprobaciones hasta una gestión ineficiente del tiempo de trabajo.
Según una investigación reciente, el 14 % de los encuestados considera que el proceso utilizado en su empresa para solicitar vacaciones es confuso. Esto sugiere que, incluso dentro de las organizaciones, existe una falta de claridad sobre cómo se deben solicitar y aprobarlas, lo que puede llevar a frustraciones y malentendidos entre empleados y empleadores.
Otro aspecto preocupante revelado por la investigación es que un porcentaje idéntico de encuestados cree que su empresa no es ágil a la hora de aprobar las propuestas. Esto puede tener consecuencias negativas tanto para la moral de los empleados como para la productividad general de la empresa. Los trabajadores pueden sentirse desmotivados si sienten que sus solicitudes de tiempo libre no son consideradas con prontitud, lo que podría afectar su compromiso y rendimiento laboral.
La importancia del tiempo libre
Tomarse un descanso es esencial para que los empleados recarguen las pilas y mantengan la productividad. Aunque el 55% de los empleados disfrutan de su trabajo, admiten que necesitan descansos periódicos. Entre los motivos se encuentran la necesidad de desconectar de los compañeros (22 %) y el estrés laboral (17 %).
“Atender con prontitud las demandas de los empleados repercute positivamente en su bienestar y desarrollo profesional. Las respuestas rápidas a las solicitudes de vacaciones, el apoyo a la conciliación y la atención a las necesidades individuales pueden ayudar significativamente a retener el talento dentro de la empresa", concluye Alba Vargas Jiménez, Lead Customer Growth en Personio.
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