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La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha denunciado esta semana el elevado número de muertes que surgen a raíz de la alta exposición al plomo. De hecho, los efectos de este metal causan efectos que podrían ser irreversibles, lo que daría lugar a la muerte.
La OMS pide medidas para reducir la exposición al plomo en las personas
La contaminación es uno de los mayores peligros a los que nos enfrentamos hoy en día. Si nos fijamos, diversos estudios afirman que en nuestro día a día nos exponemos a numerosos riesgos sin apenas darnos ni cuenta. Es lo que ocurre con la exposición al plomo, un hecho que se ha convertido en un peligro cotidiano.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) denunció el pasado lunes que, alrededor de un millón de personas muere cada año por envenenamiento de plomo y que los niños que se exponen a ello pueden sufrir problemas muy graves de salud como la anemia o la hipertensión.
En el peor de los casos, la alta exposición al plomo puede causar la muerte.
Es por ello por lo que la OMS realiza un llamamiento durante la Semana Internacional de Acción para la Prevención del Envenenamiento por Plomo, para crear conciencia acerca de esta sustancia y dar a conocer cuáles pueden ser sus consecuencias.
Uno de cada tres niños tiene altos niveles de plomo en la sangre
El plomo es tóxico para distintos sistemas corporales, por ejemplo: el sistema nervioso, el sistema reproductivo, el sistema inmunológico, el sistema sanguíneo o el cardiovascular.
Ante eso, la OMS pretende poner fin a la exposición de las personas a una sustancia tan peligrosa como es el plomo, ya que muchas de ellas tienen un nivel superior a 5ug/dl.
Por otro lado, Unicef se une a la protesta y advierte de que uno de cada tres niños de todo el mundo posee altos niveles de plomo en la sangre, lo que afecta de manera directa a los cerebros en desarrollo de estos menores. Aquí es donde nos damos cuenta de que la exposición al plomo, como a cualquier otra sustancia tóxica, puede tener consecuencias mayores.
¿Cómo nos exponemos al plomo en el día a día?
A la hora de fijarnos en la procedencia del plomo, debemos hacer hincapié en los entornos industriales, la minería, el reciclaje de desechos electrónicos y las baterías de plomo-ácido. Sin embargo, la exposición al plomo también puede experimentarse en entornos que no estén relacionados con la industria, ya que el plomo puede estar presente en las escuelas, hospitales o en los propios hogares.
Otro de los aspectos que nos afectan a la hora de proteger a nuestra salud contra el plomo es la alta exposición a la contaminación ambiental, la cual deriva de un alto nivel de plomo.
Por todo ello, la OMS hace un llamamiento a todos los países para que establezcan una serie de controles en relación a a la exposición al plomo, es decir, eliminar todas las fuentes de procedencia para proteger al ser humano de un peligro que pasa desapercibido.
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