'Ugly Food': Hay que comer con la boca, no con los ojos

El movimiento 'Ugly Food' tiene como objetivo dejar de desperdiciar esos alimentos que no tienen un aspecto perfecto. Además, lucha para que se vendan y no sean descartados por su apariencia.

Este movimiento también se conoce como 'Food Waste', y en los últimos años ha notado un auge, pues han surgido asociaciones y organizaciones que luchan para acabar con la selección de alimentos perfectos.

Y es que debemos de tener claro que las frutas, hortalizas y cualquier alimento que tenga una apariencia imperfecta son igual de nutritivos que cualquier otro que, según los comercios y vendedores, es estéticamente perfecto.

Ugly Food: El movimiento que lucha para no descartar las frutas y verduras que no tienen un aspecto "bonito"

Cabe destacar que los primeros descartadores y creadores de residuos somos nosotros, pues cuando vemos una pieza de fruta o verdura más fea, lo apartamos como si tuviera la peste.

Los expertos en nutrición coinciden en que los alimentos "feos" cuentan con una característica de Real Food y de natural. Aquellas frutas o verduras con un aspecto impoluto es de las que realmente deberíamos poner en duda su calidad nutricional.

Y es que somos muchos los que hemos comprados esos pepinos y tomates de fotografía que luego a la hora de comerlos no sabían a nada, parecía de cartón y ni olor desprendían.

Las cifras que muestran el desperdicio de alimentos son desoladoras, y desde ya tenemos que concienciarnos para acabar con esta situación que lleva a la ruina del planeta.

Pero no es todo tan crítico, pues el trabajo que realizan organizaciones que llevan como lema el movimiento 'Ugly Food', la concienciación y el aprovechamiento alimentario llega cada vez a más gente.

El origen de este movimiento se centra en Estados Unidos, Australia, Reino Unido o Francia. En los últimos años han surgido iniciativas que tienen como objetivo crear conciencia sobre el buen aprovechamiento de los alimentos.

La presencia de este movimiento en España

En España durante el 2014 nació la Fundación Espigoladors, con el fin de dar respuesta a tres problemas sociales y medioambientales:

• El desperdicio alimentario.
• El derecho a una alimentación saludable.
• La inclusión social y laborar de las personas en riesgo de exclusión.

Esta fundación que aboga por el movimiento 'Ugly Food' cuenta con un modelo transversal que trabaja para la sostenibilidad ambiental y la igualdad social.

Un modelo basado en la economía circular, pues trabaja para alargar la vida de los materiales y conseguir reducir los residuos que generamos.

Ellos trabajan con alimentos que iban a ser desperdiciados, pero gracias a su actividad, consiguen reintroducirlos en la cadena nuevamente.

Ellos luchan para que se consuman esos alimentos "feos" que el circuito comercial descarta por las políticas estéticas que dirigen el mercado alimentario.

Unas políticas dañinas que se fijan en la forma, el color, el aspecto y el calibre de los alimentos. Anna Cornudella, técnica de comunicación de Espigoladors comenta que "si una fruta o verdura es demasiado grande o pequeña en relación con el calibre marcado, es directamente descartada".

Dichas políticas estéticas hacen que el sector primario desperdicie cosechas enteras. Esto supone que, sobre todo los pequeños productores, no puedan tener un rendimiento económico adecuado para seguir con su actividad.

¿Cómo realiza este trabajo Espigoladors?

La fundación que apuesta por el movimiento 'Ugly Food' cuenta con un equipo de 600 personas voluntarias, las cuales son imprescindibles y participan en todas las actividades de la organización.

El trabajo diario de esta organización consiste en la recogida de alimentos directamente del campo, que de otra forma serían desperdiciados.

Su colaboración con los productores se hace mediante un convenio que otorga permiso a la fundación para entrar a esos campos con una serie de condiciones. Hoy en día trabajan con unos cien productores.

Los grupos de voluntarios y los trabajadores de la fundación recogen frutas y verduras. De esta forma acercan a las personas al origen de los alimentos, para que valoren el duro trabajo de los agricultores.

De esta forma, no solo le dan una oportunidad a esa 'Ugly Food', sino que realizan un trabajo de sensibilización sobre el consumo responsable y de proximidad.

El 95% de los alimentos recuperados los reparten a distintos Servicios de Distribución de Alimentos que trabajan para otorgar un consumo saludable a las personas en situación de exclusión social.

El 5% que queda, lo emplean en realizar conservas vegetales en im-perfect, donde realizan mermeladas, patés vegetales, cremas, etc.

"Se trata de un espacio de innovación culinaria para el aprovechamiento alimentario y además, un espacio de inserción y formación laboral de personas en riesgo de exclusión social", apunta Cornudella.

Una iniciativa que tiene que ir cobrando fuerza en la sociedad

En España se conoce muy poco el movimiento 'Ugly Food', pues el número de iniciativas también son escasas comparando con otros países como Francia o Reino Unido, los cuales han creado supermercados y negocios basados en este tipo de productos.

Gracias a iniciativas como las que lleva a cabo la Fundación Espigoladors, se consigue crear conciencia para acabar con el desperdicio de alimentos, la generación de residuos y crear una sociedad sostenible,

'Ugly Food' apuesta por la no discriminación de esos tomates imperfectos. Recuerda, que estos alimentos 'feos' son los más naturales y los que mejor sabor y salud te van a regalar.